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Los pilotos españoles rechazan que policías con armas de fuego custodien los vuelos

Los comandantes quieren que también se controle al personal de tierra de los aeropuertos

Jorge A. Rodríguez

Los pilotos españoles rechazaron ayer la posibilidad de que policías con armas de fuego velen por la seguridad de los vuelos. 'Nos parece una idea totalmente inaceptable, por motivos puramente técnicos, pero si al final se decide que sea así, acataremos la decisión', dijo ayer Carlos Alós,decano del Colegio Oficial de Pilotos de Aviación Comercial (COPAC). Los comandantes de aeronaves propusieron un catálogo de medidas para reforzar la seguridad, que incluye un control de pasajeros conflictivos, reducción del equipaje de mano y mayor control del personal de tierra.

Los representantes de la COPAC aseguraron ayer que 'los estándares de seguridad' aplicados en la aviación comercial 'siguen siendo válidos', pero reclamaron una coordinación más estrecha entre los responsables de la seguridad en los aeropuertos y quienes tienen que velar por ella en vuelo.

Los pilotos no consideran aceptable la presencia en los aviones de funcionarios de policía con pistola. 'Su presencia con armas de fuego dentro de un avión en vuelo aporta más inseguridad que el beneficio disuasorio que representa', asegura la COPAC. 'Las leyes físicas son inexorables y si a 40.000 pies de altura, con una diferencia de presión brutal entre el exterior y el interior, cualquier objeto, como una bala, perfora la estructura del aparato, los daños que provocaría serían incalculables y entrañaría un riesgo potencial mayor', explicó Alós.

La alternativa sería que esos funcionarios llevaran otro tipo de armas (aerosoles paralizantes, inmovilizadores eléctricos...) cuyo posible uso no ponga en peligro la seguridad aérea. 'Eso sí, si todos los expertos del mundo obligan a que se lleve personal armado tendremos que aceptarlo', puntualizó a Efe Luis A. Ortega, secretario del colegio.

Reducción de bultos

Las medidas que proponen los comandantes de vuelo españoles pasan por pasar por los escáner todos y cada uno de los bultos de equipaje y la reducción del equipaje de mano a una sola pieza pero 'revisando su contenido lo más cerca posible de la puerta de acceso al avión y en una zona que se considere estéril'. Incluso querrían recuperar los controles aleatorios de las maletas, de forma que antes de entrar en el avión cada pasajero tenga que reconocer su propio equipaje justo antes de meterlo en la bodega de los aparatos. Plantean también una mejora de los medios técnicos e identificación de pasajeros, como las que ya se están poniendo en marcha de forma experimental en Australia y Nueva Zelanda de identificación de pasajeros por el iris del ojo. A su entender, el sistema de las tarjetas de embarque 'ha quedado obsoleto'.

Los pilotos quieren que las medidas de control se extiendan al personal de tierra de los aeropuertos para que haya una 'identificación real y positiva de todas las personas que tienen acceso a la parte aeronáutica del aeropuerto', donde creen que debería incrementarse la vigilancia.

La seguridad aumentaría considerablemente, según los pilotos en el caso de que se elaborara una normativa específica que permita la identificación y control de los pasajeros que ya hayan tenido con anterioridad comportamientos 'conflictivos o violentos'. Como complemento, reclaman la recuperación de la autoridad del comandante a fin de que pueda rechazar el embarque de un viajero que tenga ese perfil. Las medidas técnicas que puedan adoptarse en la aviónica y electrónica del aparato se consideran 'reservadas'.

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Sobre la firma

Jorge A. Rodríguez
Redactor jefe digital en España y profesor de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS. Debutó en el Diario Sur de Málaga, siguió en RNE, pasó a la agencia OTR Press (Grupo Z) y llegó a EL PAÍS. Ha cubierto íntegros casos como el 11-M, el final de ETA, Arny, el naufragio del 'Prestige', los disturbios del Ejido... y muchos crímenes (jorgear@elpais.es)

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