La matrícula de Derecho y Económicas cae a la mitad en un quinquenio
La creación de Elche no subsana las disfunciones
La evolución de los estudiantes de nuevo cupo matriculados en las universidades públicas de la Comunidad confirma la tendencia a la baja, que se inauguró hace cinco años y que el curso pasado dejó 2.873 plazas vacantes. 'Las previsiones de plazas vacías al cierre de la preinscripción, a final de mes, son, incluso, sensiblemente mayores', según un estudio. La caída es distinta por campus y titulaciones, siendo Derecho y Económicas las que acumulan sólo en Valencia una pérdida de 12.000 alumnos, el 50%, en el último quinquenio.
La matrícula en los centros de las cinco universidades públicas valencianas sigue la misma tendencia general a la baja que el resto del territorio nacional, donde el curso 1999-2001 se saldó con 30.000 plazas vacías en las 48 universidades públicas y, en proporción, cerca de 3.000 en el sistema valenciano. Según las primeras previsiones confirmadas por el Instituto de Robótica, a quien la Dirección General de Universidades viene encargando este estudio desde hace cuatro años, a punto de que se cierre la matrícula para el curso 2001-2002 que comienza, las plazas vacías 'pueden superar sensiblemente la cifra del año pasado'. Pese a este desajuste entre la oferta anual de nuevas plazas y la caída de la demanda -conocido de sobra por las estadísticas anuales del Consejo de Universidades- el Ministerio de Educación en vez de actuar de instrumento corrector optó por autorizar para este curso la misma cantidad de nuevas plazas que el anterior, 32.030.
Estos datos, cruzados con los anuarios de las universidades valencianas, confirman también otra tendencia general: que el desajuste es distinto por campus y titulaciones. En este contexto, la Universidad de Valencia es la más perjudicada por la caída de matrícula en el último quinquenio. Desde el curso 1994-95 hasta el 2000-01 la universidad matriz -de la que se han nutrido las otras cuatro universidades públicas creadas en las dos últimas décadas- ha perdido casi el 20% de su alumnado. Mientras en 1993-94 tenía 61.115 alumnos, y en los siguientes tres cursos perdió un promedio de entre 500 y 700 alumnos, a partir del curso 1997-98, el descenso de matrícula ha sido de 2.000 estudiantes por año, alcanzando el curso pasado 2000-2001 su cota más baja con 49.653 estudiantes.
El recorte en este mismo periodo, según el anuario de la Universidad, lo concentran, fundamentalmente, cinco facultades: Derecho (que ha pasado de 11.504 alumnos en 1993-94 a 6.847 el curso pasado); los estudios de Ecómicas y Empresariales (con 15.660 matriculados en el 93 a 8.430 en 2000); Psicología (de 5.629 a los 3.132 del año pasado) y Magisterio (que ha pasado de 3.014 estudiantes a los 1.610 en 2000). En contrapartida, tres facultades de Ciencias han incrementando significativamente su demanda año con año en el mismo periodo. Éstas son: la facultad de Biología (que ha pasado de 1.805 estudiantes en el curso 93-94 a 2.397 el año pasado); Farmacia (de 2.871 a 3.060) y Física (de 1.638 alumnos a 2.784 en 2000).
Por universidades, la creación de la Miguel Hernández en Elche en 1996 explica el director de Robótica, Gregorio Martín, no ha sido capaz de absorber la caída generalizada en la Comunidad y, en concreto, en la Universidad de Alicante, que el curso pasado perdió 1.283 estudiantes. En 2000, Elche creció en 874 matrículas más, de las cuales, el 68% correspondieron a las titulaciones que ya se impartían en los centros de Medicina, Enfermería, Estadística y Neurociencias segregados al campus de Alicante. En la Politécnica sólo quedaron vacías 184 plazas, en su mayoría en la extensión de Alcoy, y Castellón se estabilizó, ganando 283 alumnos.
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