La oficina de subastas judiciales comenzará a funcionar a finales de año
La iniciativa busca facilitar el acceso del gran público a las pujas de inmuebles
La única oficina de información de subastas judiciales que habrá en el País Vasco y una de las tres primeras de España prevé celebrar la primera puja de bienes por este sistema antes de que finalice este mismo año. La oficina comenzó a funcionar el pasado 1 de septiembre y está instalada en la planta baja del edificio que la Audiencia Provincial de Vizcaya tiene en la calle Buenos Aires de Bilbao, junto a la oficina de atención al cliente.
El Juzgado Decano de Bilbao tomó la iniciativa de crear este nuevo servicio, que pretende dar la máxima publicidad y transparencia a las subastas de los bienes muebles e inmuebles embargados judicialmente por impago de hipotecas o ejecución de otras deudas. Además, servirá para poner freno a la actuación de los subasteros profesionales, que con métodos dudosos suelen acaparar los pisos, lonjas u objetos a bajo precio, excluyendo a otros posibles interesados. Hasta ahora, el público sólo participaba en las subastas de los depósitos de piezas de convicción, es decir, joyas y objetos procedentes de robos que no se ha podido restituir a sus dueños.
La falta de información ha dificultado el conocimiento del público sobre la apertura de la oficina y sólo quienes se acercaron al Palacio de Justicia la última semana pudieran reparar en su existencia. 'Estamos ultimando la preparación de unos trípticos bilingües y cuando los tengamos terminados, que esperamos sea en los próximos días, convocaremos a los medios de comunicación para que todo el mundo sepa que la oficina está abierta', explica Juan Pablo González, juez decano de Bilbao.
Falta de concurrencia
En su opinión, la experiencia indica que es la participación en la puja la que determina la recaudación económica de una subasta y, por tanto, su éxito o fracaso. La falta de concurrencia, por la oscuridad del procedimiento o por la intervención disuasoria de los subasteros, perjudica seriamente tanto al deudor que ha sido embargado como al acreedor.
En el caso del primero, sus bienes se venden por un importe inferior al que alcanzarían en el mercado por falta de competencia, mientras que el segundo no consigue resarcirse de la deuda con el bajo resultado de la subasta. Actualmente, las subastas se celebran en los juzgados de la calle Barroeta Aldama.
La apertura de la oficina ha sido posible tras la entrada en vigor de la nueva Ley de Enjuiciamiento Civil que permite que sean personas o entidades especializadas, públicas o privadas, las que procedan al tratamiento y subasta de los bienes embargados. La oficina es la encargada de coordinar la información recibida de los juzgados y las empresas especializadas en subastas.
La oficina informará gratuitamente de las pujas y facilitará los datos necesarios para la participación de los interesados en los procedimientos judiciales: precio de salida, consignación necesaria para participar, hipotecas, gravámenes, si existen cargas, así como otros datos de interés. Además, la información se publicará también en los diarios y en revistas.
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