Detectados tres nuevos focos de peste porcina clásica en Lleida

El fantasma de la peste porcina clásica no acaba de esfumarse en las comarcas de Lleida, donde van apareciendo nuevos casos sospechosos cada vez que la epidemia parece estar controlada. Los técnicos del Departamento de Agricultura de la Generalitat confirmaron ayer que se han empezado a sacrificar los cerdos de tres granjas de la comarca de la Noguera porque los animales presentaban síntomas de tener la peste.

Las sospechas se centran en dos granjas de Bellmunt d'Urgell, con 250 madres reproductoras, y en otra de la cercana localidad de Bellcaire d'Urgell, con 850 cerdos de engorde. Los primeros análisis realizados por los veterinarios del Departamento de Agricultura indican que los animales podrían estar incubando el virus. Las muestras han sido enviadas al Laboratorio Estatal de Referencia de Madrid, pero como medida preventiva, los animales ya han empezado a ser sacrificados.

Se da la circunstancia de que las dos granjas de Bellmunt están dentro del radio de protección de uno a tres kilómetros del último foco declarado en esa localidad el pasado 5 de septiembre. La Generalitat ya ha activado las medidas de precaución previstas ante posibles nuevos focos, consistentes en el sacrificio inmediato de los animales y en la inmovilización de las granjas ubicadas dentro de las zonas de protección y vigilancia.

En el caso de que el Laboratorio Estatal de Referencia confirme las sospechas, la Generalitat se vería obligada a declarar oficialmente tres nuevos focos de peste porcina clásica en Lleida, con lo que su número se elevaría a 20 desde que el pasado 14 de junio se detectó el primer brote en una granja de Soses (Segrià). Desde aquella fecha, se han sacrificado más de 68.000 cerdos en seis comarcas de Lleida, donde en estos momentos hay más de un millón de animales inmovilizados, que no podrán ser exportados como mínimo hasta el próximo 15 de octubre por decisión del Comité Veterinario Permanente de la Unión Europea. El coste de la crisis del porcino es ya de 1.200 millones de pesetas en concepto de indemnizaciones.

Hasta ahora, la Generalitat respetaba los animales reproductores a más de medio kilómetro de los focos, pero cambió el criterio tras las críticas recibidas a finales de agosto cuando la peste rebrotó en una granja de Penelles, localidad próxima a Bellmunt, cuyos animales no habían sido eliminados por 20 metros.

Si siguen apareciendo nuevos casos, Agricultura no descarta eliminar 250.000 cerdos de la zona de la Noguera, Urgell y Pla d'Urgell para evitar 'males mayores'. El sindicato Unió de Pagesos (UP) no cree oportuno tomar esta medida si no empeora la situación.