Piqué informa al Congreso de que la reacción requerirá un acuerdo de la OTAN

La participación aliada en cualquier reacción armada de Estados Unidos frente al terrible atentado del pasado martes 'requerirá un nuevo acuerdo a 19' en el seno de la OTAN, según explicó ayer Josep Piqué en el Congreso a la Comisión Mixta de Asuntos Exteriores. El ministro afirmó que el compromiso de apoyo 'si se determina que el ataque fue dirigido desde el extranjero' alcanzado el miércoles por el Consejo Atlántico 'no es de aplicación automática' y tendió a quitar inmediatez a una eventual reacción sobre la que, aseguró, 'no sirve especular ahora'.

No obstante, cuando la prensa le señaló, tras su comparecencia, que el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, acababa de señalar al terrorista Osama Bin Laden como cerebro del ataque al World Trade Centre, Piqué, sorprendido, dijo que había que 'esperar la confirmación' y que 'a partir de ahí España va a cumplir todos sus compromisos para que los culpables reciban su castigo'.

La invitación a evitar los juegos de hipótesis en el debate que siguió a esta intervención no sólo se refería a las posibles acciones militares, que al ministro de Asuntos Exteriores le hubiera resultado incómodo comentar con referencias a países o circunstancias concretas, sino al alcance mismo del atentado y sus consecuencias para el futuro de la convivencia internacional.

'No es todavía el momento de hacer una valoración definitiva, pero sí quiero reafirmar la condena de la naturaleza execrable de estos actos frente a los que nuestras expresiones de condolencia y solidaridad, como víctimas también del terrorismo, nunca serán excesiva', dijo Piqué. 'Mientras no se identifique a los culpables, hay que evitar las especulaciones inútiles', añadió, 'que no favorecen la estabilidad que necesitamos. Ciertamente, el ataque ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de nuestras sociedades. Estamos ante una nueva amenaza que tiene que ser respondida por todos. No debemos pensar en términos de enfrentamiento entre civilizaciones, sino de lucha de la humanidad contra los que cometen crímenes contra la humanidad. Es preciso evitar, por ello, trasladar las consecuencias del atentado a otros conflictos concretos'.

Tras esta última advertencia, referida muy directamente a la situación en Oriente Próximo y similar a las hechas por las autoridades israelíes en los últimos días, Josep Piqué pidió 'confianza en nuestros valores: democracia, derechos humanos, libertad', y aseguró que 'vamos a ver la fortaleza de nuestras sociedades'.

El ministro compareció ante el Parlamento a petición propia, aunque hubiera querido resolver este tema en el pleno celebrado durante la mañana en torno a unas enmiendas al Tratado de Niza, que fueron rechazadas, y no en la Comisión Mixta, ante la que finalmente hubo de presentarse por la tarde por exigencia de CiU. Los aliados catalanes del Gobierno impusieron esta modalidad como protesta ante el hecho de que el presidente del Gobierno, José María Aznar, abordara la víspera la crisis abierta por el atentado de Nueva York exclusivamente con el líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, y no con toda la Cámara.

Más allá de esta anécdota, todos los partidos expresaron solidaridad con Estados Unidos y con la actitud del Gobierno español, aunque IU se distanció de una eventual respuesta militar. El líder de este grupo, Gaspar Llamazares, ya había señalado por la mañana que entiende que el Tratado de la OTAN no es un instrumento para combatir el terrorismo, que hay que evitar la 'acciones indiscriminadas' y que las nuevas amenazas requieren 'nuevas respuestas imaginativas'.

El PSOE, en cambio, a través de su portavoz, Jesús Caldera, anunció su apoyo a la acción del Gobierno, siempre que la respuesta tenga el máximo consenso aliado y sea 'justa, legal y contribuya a incrementar la seguridad internacional'. El PSOE reconoce que, como afirmó Piqué, las eventuales acciones militares no requieren la aprobación del Parlamento, aunque exigió que el Gobierno consulte con la oposición.

El ministro de Asuntos Exteriores informó de que está descartado que haya víctimas españolas en el Pentágono, pero no pudo decir lo mismo de las Torres Gemelas, donde, afirmó, 'aún es pronto para saber lo que hay bajo los escombros'.