Los 17.000 alumnos extranjeros de este curso se concentran en aulas de Málaga y Almería

Cerca de 17.000 menores extranjeros se matricularán este curso en colegios e institutos de Andalucía, la tercera comunidad autónoma con mayor número de alumnos de otros países. Aunque su procedencia es múltiple (139 nacionalidades distintas), destacan los marroquíes (3.312 el curso pasado) entre los países no comunitarios, cuya presencia se concentra claramente en Almería, donde sus familias se establecen atraídas por las ofertas de empleo agrario. El crecimiento del alumnado inmigrante en Andalucía es constante: en cinco años se ha saltado de 5.092 a los 17.000 previstos este curso.

La distribución del alumnado extranjero es tan poco homogénea como el propio mapa autonómico de la inmigración. Son casi anecdóticos en provincias como Jaén o Córdoba, mientras que en Málaga abundan los colegios multiculturales como el Albaida, en Torremolinos, donde predominan los escolares europeos.

Es en Almería, donde la concentración de alumnado que son hijos de inmigrantes no comunitarios se produce en comarcas muy concretas, donde se ha desplegado un modelo específico de docencia para fomentar la interculturalidad a través de Aulas Temporales de Adaptación Lingüística (ATAL), en las que se produce una inmersión del menor en la lengua y la cultura española antes de que se incorpore al ciclo ordinario. Sólo hay dos fijas en Andalucía: en los colegios José Salazar, en El Ejido, y Las Lomas, en Roquetas de Mar. Ambas están en Almería, donde también funcionan otras 10 de carácter itinerante.

Los sucesos ocurridos en febrero de 2000 sirvieron, en cierta medida, de aldabonazo para que la Consejería de Educación reforzase el carácter intercultural del sistema educativo en la provincia. Al asturiano José Manuel García Argüello, de 32 años, lo contrataron entonces como profesor de las aulas puente itinerantes de enseñanza secundaria. El año pasado atendió a 70 alumnos extranjeros en los cuatro centros que le correspondían. En cuanto el escolar dispone de nociones básicas se incorpora a su grupo ordinario para 'evitar pequeños guetos', apostilla García Argüello.

El profesor da clases rodeado de mapas y banderas de medio mundo, ha aprendido a reñir sin hablar porque no le entienden aunque a veces se descubre gritando como si el menor tuviese problemas auditivos en lugar de un mero desconocimiento de la lengua. Aparte de la enseñanza del idioma, los profesores itinerantes trabajan en cada centro a favor de una educación intercultural para evitar actitudes de xenofobia y fomentar el respeto recíproco con actividades diversas.

Nociones de castellano

José Manuel Pérez, profesor de una de las dos aulas puente de carácter fijo de la provincia, explica que el objetivo básico es que los escolares obtengan unas nociones mínimas de castellano para poder seguir el curso como los demás alumnos. En cuanto esto se logra se incorporan a sus aulas. Después de varios años, Pérez ha observado que, cuando se integran en sus aulas, 'son los propios compañeros los que les ayudan a avanzar'.

Los responsables de la Consejería andaluza de Educación se vanaglorian de ser la única comunidad autónoma que cuenta con un plan específico para la educación de inmigrantes, dotado con 1.244 millones de pesetas, que se ha traducido en la contratación de 179 profesores de refuerzo, la apertura de 12 nuevas aulas puente y otros servicios complementarios. 'Haya o no inmigrantes hay que impulsar los valores de interculturalidad y por historia, ubicación y política Andalucía siempre ha sido tierra de movimientos migratorios', sostiene el director general de Solidaridad y Orientación Educativa, Sebastián Sánchez.

Existe, sin embargo, una desigualdad notable en en cuanto a la presencia de extranjeros entre los colegios públicos y concertados, a la vista de un estudio de CC OO, donde se recogía que sólo el 5% de los extranjeros estaba escolarizado en los centros concertados de Almería, mientras que el restante 95% lo hacía en colegios públicos. El director general de Solidaridad y Orientación Educativa asegura que no han detectado trabas a la matriculación de menores en colegios concertados.