Un ladrón entra de noche en un banco y espera la apertura automática de la caja

El robo se produjo sobre las ocho y media de la mañana, en el número 3 de la calle de Isla Graciosa, junto a una administración de Hacienda. Según el relato del apoderado del banco, que llegó en ese momento a la sucursal con la cajera, el ladrón estaba en la antesala de la caja fuerte. Al entrar, los dos empleados oyeron ruidos. El apoderado se acercó a ver lo que sucedía y se topó con el atracador, que llevaba la cara cubierta por un pasamontañas.

El supuesto ladrón, que llevaba bajo el brazo una caja metálica que había sacado de la caja fuerte, sacó un revólver y apuntó al apoderado, que tuvo el tiempo justo de escapar y meterse dentro del búnker o zona de seguridad, en la que ya estaba la cajera porque es su puesto habitual de trabajo. Tras cerrar la puerta, avisaron a la policía. Mientras tanto, el ladrón se dio a la fuga a la carrera. El portero de la finca llegó a ver al delincuente e intentó detenerlo, pero éste, pistola en mano, le obligó a saltar al jardín desde una primera planta, lo que le provocó una fractura en el tobillo derecho.

Falso techo

Los empleados, mientras, comprobaron que parte del falso techo del vestíbulo de entrada a la caja fuerte estaba roto justo en la zona en la que una rejilla de ventilación permite el acceso a la sucursal desde un jardín exterior, según relataron fuentes policiales. Agentes de la comisaría de Fuencarral acudieron de inmediato a la sucursal bancaria e iniciaron la búsqueda del delicuente.

A los pocos minutos detuvieron a una persona que se estaba cambiando de ropa y que parecía el autor del robo. Horas después fue puesto en libertad al comprobarse que no estaba relacionado con el suceso. La policía encontró en la calle, cerca de la sucursal, un revólver simulado, una linterna y un destornillador

Según explicó a Efe la empleada de la limpieza, Dolores A., la cajera le dijo que fueron dos los atracadores y que habían entrado por una ventana interior. Esta versión contrasta con la declaración del apoderado, que en todo momento habla de un solo atracador. El director de la sucursal estaba efectuando una gestión fuera del banco, por lo que no acudió ayer por la mañana a la apertura.

El Grupo XII de Atracos estudia ahora las cámaras del circuito cerrado de la entidad para comprobar si han grabado la forma en la que el ladrón entró en la sucursal y si las imágenes permiten identificarle.