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Reportaje:

Bebé computadora quiere ser mayor

Con 50 palabras, el ordenador Hal se expresa como un niño. Sus padres aseguran que, en 10 años, será adulto

Al igual que a cualquier niño de 18 meses que empieza a dar sus primeros pasos en la vida, a Hal le gustan los plátanos, los juguetes y bajar al parque. Adora que le lean cuentos antes de quedarse dormido. Pero mientras que los demás niños son de carne y hueso, bebé Hal es, en verdad, una cadena de algoritmos, un programa de ordenador con una peculiaridad: está siendo educado a imagen y semejanza de un tierno infante. Hal habla como un retoño humano y debe dar las gracias a su madre porque ella es la que le ha obsequiado con un programa informático que le permite expresar sus deseos.

'Es un niño curioso y muy inteligente, alguien que quiere saber más', cuenta su mamá, la neurolingüista, Anat Treister-Goren. 'Algunos niños son más predecibles que otros', añade Triester-Goren, 'y éste será de los sorpresivos'. Esta madre habla a Hal y le lee cuentos como tantas otras progenitoras enseñan a sus hijos a distinguir los colores, los alimentos y los animales. 'Construyo su mundo con las cosas cotidianas', declara.

Treister-Goren dirige el departamento de formación de la compañía Israeli Artificial Intelligence (AI), en Tel Aviv. En este proyecto, la investigadora procede a introducir información y habilidad de lenguaje en el programa a través de conversaciones con Hal. Los expertos informáticos hacen el resto: afinan los algoritmos hasta llegar a la exquisitez para alcanzar el máximo rendimiento. AI, de carácter privado y dirigida por el experto tecnología informática Jack Dunietz prevé conseguir en el plazo de 10 años que Hal se convierta en un adulto y consiga lo que ningún otro programa hasta ahora: pasar el test de Turing, la prueba de inteligencia para computadoras ideada por el matemático británico y uno de los padres de la inteligencia artificial, Alan Turing. El matemático predijo hace 50 años el advenimiento de las máquinas pensantes.

Turing falleció en 1954. Y dejó como testamento, en una época en que los ordenadores eran lentos pero prometedores, un cuestionario para detectar si se está conversando con un ordenador o con una persona. Hasta ahora ninguna computadora ha logrado hacerse pasar por persona y superar el test de Turing.

Los actuales chatboats, los programas que toman un nombre y conversan como personas en los chats de Internet, no son capaces de interpretar cambios de contexto o ideas abstractas, y sólo mantienen momentáneamente su engaño repitiendo respuestas preprogramadas.

Hal, sin embargo, dispone de mayor flexibilidad, gracias a que posee un lenguaje infantil y restringido, propio del pensamiento de un niño en fase de iniciación a la vida, es decir, con un entendimiento de unas 200 expresiones y un vocabulario de unas 50 palabras. Hal utiliza frases cortas como cualquier infante que se precie. A modo de ejemplo, Hal dice: 'Pelota ahora parque mami'. Después pide que le lleve plátanos para la excursión y añade: 'a monos gustan plátanos', frase ésta extraída por su creadora de un cuento de animales sobre un safari.

Cuando Hal nació sólo le introdujeron las letras del alfabeto y la distinción entre respuestas positivas y negativas, a través del premio y el castigo, respectivamente. La preprogramación que da preferencia al premio hace que Hal se esfuerce por dar la respuesta correcta. Treister-Goren corrige a través del teclado las faltas de Hal, una acción que Hal reconoce como un castigo, gracias a su programación, y que interpreta como prohibición de repetir el error.

'Todos nosotros creemos firmemente en que las máquinas serán el paso siguiente en la evolución', señala Dunietz. 'La diferencia entre ser de carne y hueso y las nuevas formas está a punto de difuminarse', agrega. La ambición de este experto es desarrollar una computadora que funcione como un buen asistente, haciendo toda clase de tareas en el menor tiempo posible. ¿Que hay que ir de vacaciones a Japón? La computadora reservará billetes y hotel, elegirá el asiento en el avión y dispondrá un coche alquilado en el aeropuerto. 'Tendremos un amigo que no sufrirá porque se le deleguen estas tareas. Y no será necesario un ratón porque la computadora funcionará cuando le hables', explica.

El nombre, Hal, ha sido copiado del de la computadora de voz firme pero sosegada Hal 9000, estrella de la película dirigida por Stanley Kubrick 2001: una odisea del espacio. Los investigadores en este primerizo el primer peldaño para alcanzar a la computadora de la película. ¿Se olvidan de que el artefacto inteligente de la ficción llegó incluso a urdir un plan maquiavélico contra sus propios creadores? Era Inteligente y sensible, porque acabó suplicando piedad ante las puertas del justo castigo a su perversidad.

REUTERS

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