Vilagarcía de Arousa acoge una muestra de pop alternativo

La nutrida tribu indie de toda España ya tiene un nuevo punto de encuentro para escuchar a los grupos de culto que son tan difíciles de encontrar en el amplio programa de festivales y conciertos del verano español. La II Edición del Festival del Norte se cerró la pasada madrugada en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra) con el objetivo cumplido de ofrecer una completa muestra del panorama de la música alternativa que se hace en Europa.

Los alemanes Le Hammond Inferno, los islandeses Gus Gus, los franceses Le Grand David y los españoles Los Planetas han sido las estrellas de una cita que aspira a consolidarse como una alternativa modesta a Benicàssim, la tierra prometida para los indies de España y de buena parte de Europa. En Galicia, las aspiraciones quedarán colmadas si se consigue apuntalar un festival sin grupos de masas pero con la calidad como bandera.

Todos los buenos aficionados al pop en España conocen la revista Vibraciones pop, que se edita en Vilagarcía y que es el germen de este festival. Sus editores, Toño y Susana Caneda, iniciaron el año pasado la aventura de organizar un evento que traiga a su ciudad a los grupos que más les gustan y que sirva de refugio a los que huyen de la música que suena en las emisoras convencionales. El apoyo del Ayuntamiento de Vilagarcía y de otros patrocinadores les ha permitido realizar su sueño y ahora sólo falta que el público entendido responda para que el certamen pueda convertirse en una cita habitual del verano gallego.

El festival comenzó en la tarde del viernes con cuatro bandas españolas que no figuran en las listas de los más vendidos, pero que tienen un público muy fiel. Pese a algunos problemas de sonido, De Luxe, Automatics, Sidonie y Sexy Sadie no decepcionaron a sus seguidores y calentaron el ambiente para la explosión dance que esperaba a las cerca de 2.000 personas que acudieron a la primera jornada del festival.

La aparición en escena de Le Hammond Inferno marcó el punto álgido de la noche y pasó el protagonismo al baile, que ya no se interrumpió hasta bien entrada la madrugada. El dúo alemán comenzó con una sesión de sonidos pregrabados, y poco a poco fue dando entrada a la batería y la guitarra para acabar firmando una actuación redonda.

Los islandeses Gus Gus tenían el listón muy alto pero no decepcionaron con un repaso a los temas de su último disco, This is normal, que es todo un catálogo de ritmos funk, techno y hip-hop. El ambiente festivo no era el más adecuado para captar la ironía y el erotismo de sus letras, pero cumplieron el papel estelar que los organizadores les habían reservado en el cartel con un concierto que relajó a todos los que aguantaron la intensidad de Le Hammond Inferno.

Anoche se cerró el festival con la élite de los grupos españoles alternativos, con Los Planetas a la cabeza acompañados por Astrud, Mastretta y Cooper.