El exilio anticastrista se disputa el dinero que donó Mas Canosa

La familia del difunto líder anticastrista colocó a su nombre el dinero a fines de julio, excluyendo a varios miembros 'rebeldes' de la junta, que ahora los denuncian por actuar 'dictatorialmente'. La vieja guardia se ha estado resistiendo al cambio impulsado por el ala moderada que encabeza Jorge Mas Santos y que pretende moderar el tono político combativo e intolerante que ha caracterizado a la organización desde sus comienzos. La pelea ideológica se agudizó tras el papelazo internacional que hicieron con el caso del niño balsero Elián González, pero se mantuvo a puertas cerradas. Hasta que, hace dos semanas, estalló el problema del dinero.

'Cuando vimos eso [que les sacaron de la directiva que controla el dinero], nos dimos cuenta de que todo ha cambiado', se lamentó el martes Feliciano Foyo, que hasta su renuncia era tesorero y había sido amigo íntimo de Mas Canosa desde los años setenta. Junto a Foyo, en las últimas dos semanas han anunciado su dimisión otros 23 directores de la FNCA, acusando a los reformistas de 'violar los principios de la lucha anticastrista'.

Mas Canosa donó antes de morir 200.000 acciones de su compañía de telecomunicaciones, Mastec, para crear un fondo que financiara indefinidamente la FNCA. Las acciones valían entonces, noviembre de 1997, cinco millones de dólares (cerca de mil millones de pesetas) e incluso llegaron a triplicarse el año pasado, aunque ahora, con la caída de la empresa en la Bolsa, se sitúan en unos 500 millones de pesetas.

Mas Santos ha rehusado hacer declaraciones sobre el cambio de la titularidad del fondo económico, pero ha afirmado estar dispuesto a pagar el precio de la escisión en la FNCA a cambio de limpiar la imagen de intolerancia. 'Si a alguien le resulta controvertido, que así sea', dijo ayer.

Como parte del reciclaje de imagen, Mas Santos tomó recientemente una decisión que levantó ampollas entre las filas radicales. En contra de la estrategia de la FNCA de boicotear a los artistas de la isla que actuaban en Miami, el delfín de Mas Canosa patrocinó la celebración de los premios Grammy Latinos en esta ciudad, que contó con la actuación de cantantes de La Habana.

Ésa y otras muestras de suavización le han valido la etiqueta de traidor al legado de su padre. Pero hay cosas que no han cambiado. Los dos pilares en los que apoya su política de presión siguen siendo la petición de encausamiento a Fidel Castro y el reforzamiento del embargo.