Hundidas 30 pateras en Ceuta para crear arrecifes artificiales

La Delegación del Gobierno de Ceuta autorizó ayer el hundimiento de 30 pateras decomisadas por tráfico de inmigrantes que servirán para la colonización de especies marinas. Esta iniciativa, que comenzó a desarrollarse el pasado verano, supone la conversión de las tétricas barcas de madera en arrecifes artificiales, situados en un banco de arena a unos 100 metros de la bahía sur de la ciudad autónoma y a unos 28 metros de profundidad. De esta forma, la Delegación del Gobierno pretende dar una salida "honrosa" a los cientos de embarcaciones que se apilan en naves portuarias y desguaces, que hasta hace un año eran incineradas para evitar que volvieran a ser utilizadas para cruzar el Estrecho.

Antes de que concluya agosto se habrán sido hundidas otras 70 pateras, que se unirán a las 125 que ya están bajo el agua formando un gran arrecife circular de unos 50 metros de diámetro en la que ya han anidado con éxito especies codiciadas como la brótola, el abadejo y el calamar.

Este proyecto, ideado por un biólogo ceutí, cuenta con el visto bueno de la Facultad de Ciencias del Mar de la Universidad de Cádiz y está avalado por el delegado del Gobierno en la ciudad, Luis Vicente Moro, que subrayó ayer los beneficios ecológicos que estas pateras tendrán para el litoral ceutí en unos seis meses.

El remolcador Punta Mayor de Salvamento Marítimo, se encargó del traslado de las barcas, lastradas con más de una tonelada de hormigón cada una, hasta el punto costero escogido, la cala del Desnarigado, donde los submarinistas de la Guardia Civil y de la Federación de Actividades Subacuáticas aguardaron para colocarlas en su sitio exacto.