Supuesta dimisión del jefe de los paramilitares colombianos

Carlos Castaño ha renunciado al oficio que ha ejercido en los últimos cuatro años: el mando de los ocho mil hombres que forman las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), los mayores violadores de derechos humanos en el país. Así lo asegura al menos un mensaje en la página web del grupo, aunque otras versiones aseguran que la 'renuncia irrevocable' de este hombre de 36 años es apócrifa.

El mensaje apareció el miércoles por la tarde y aunque Castaño, muy acostumbrado a salir en los medios de comunicación, no había dado la cara 24 horas después, declaraciones privadas de sus lugartenientes confirman que es verdad.

'Compañeros de Causa, somos en las AUC amigos y respetuosos de las instituciones del Estado. Este principio es inviolable. Respétenlo', dice el corto mensaje que termina parafraseando a Antonio Machado: 'Con el hilo que nos dan tejemos lo que tejemos'.

Hay alguna razones que explicarían la supuesta decisión de Castaño. Hace una semana, en una ofensiva contra los financiadores de la ultraderecha, la fiscalía entró en Montería, capital del departamento de Córdoba en la región Caribe, considerada fortín de los paras. Desde ese momento, información comprometedora para Castaño ha pasado al organismo investigador.