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AULAS

El profesorado contratado en las universidades andaluzas sobrepasa los límites de la LRU

El número de docentes funcionarios ascendía a 7.573 en el curso 1999-2000

El número de profesores funcionarios en el curso 1999-2000 era de 7.573, lo que implicaría que los contratados tendrían que ser 1.514 según la LRU y no los 5.938 que es la cifra de contratos existentes. Los datos los ha ofrecido la Secretaría General de Universidades de la Consejería de Educación, y aparecen publicados en el informe sobre la Programación Universitaria elaborado por tres expertos que trabajan en las universidades andaluzas.

En este informe se indica que prácticamente todas y cada una de las universidades andaluzas incumplen el precepto legal de la LRU 'tanto en lo concerniente al número de profesores contratados con relación al de profesores funcionarios, como a la incorporación a efectos de plantilla de los ayudantes en su calidad de profesores'. La universidad con mayor porcentaje de contratados es la Pablo de Olavide, con un 73,3%, seguida de la de Huelva con un 60,4%. En el otro extremo de la tabla se encuentra la Universidad de Córdoba, con un 31,5% seguida de la de Granada, con un 35,8%.

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El informe resalta que, curiosamente, las plantillas de personal docente e investigador con elevado índice de funcionarios se corresponden con las ramas que registran menor demanda por parte de los alumnos, y son también las que tienen mayor índice de exclusividad en las labores universitarias de éste profesorado. 'Son las titulaciones ubicadas en las ramas de las Ciencias Sociales y Técnicas las más demandadas por el alumnado y donde la ocupación del profesor a tiempo parcial es más frecuente, y menor la participación del profesorado funcionario, pudiendo llegar a constituir una amenaza para la eficacia de nuestro sistema universitario', destaca el informe.

Cuando el informe analiza la relación entre profesorado y alumno establece que las universidades andaluzas cumplen la normativa que establece que el número total de personal docente de cada universidad no podrá ser inferior al que resulte de aplicar la relación 1/25 respecto al número de sus alumnos. 'Las universidades no sólo cumplen esta ratio, sino que, además, en los últimos años, a pesar del crecimiento registrado tanto por la oferta como por la demanda, han experimentado una reducción significativa en el valor absoluto de sus respectivos parámetros'.

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