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Reportaje:PREMIOS DEL COLEGIO DE ARQUITECTOS

La apuesta por la solución sencilla

El Colegio Oficial de Arquitectos Vasco-Navarro (COAVN) premia cada dos años los mejores trabajos realizados en el bienio anterior que se presentan a concurso en distintas modalidades, desde edificación a interiorismo, sin olvidar el planeamiento o la rehabilitación. La iniciativa no sólo supone el reconocimiento de la obra galardonada, sino un balón de oxígeno para los arquitectos que realizan habitualmente su trabajo en estos cuatro territorios, cuyos proyectos pasan muchas veces desapercibidos.

De este modo, quizás cuando el interesado pasee por la localidad navarra de Mutilva Baja y vea los adosados que diseñaron Javier Pérez Herreras y José Valdenebro disfrute con una de las resoluciones más inteligentes de una parcela, tal y como la ha considerado el jurado de los premios. 'Estamos ante un juego muy bien resuelto de los espacios, teniendo en cuenta los niveles del edificio y el tamaño del terreno donde se ubica la casa, todo ello con un presupuesto económico', explica el presidente del jurado, José Garitacelaya.

Las casas de Mutilva Baja tienen una apariencia, en principio, austera, con reminiscencias industriales en su cubierta en forma de dientes de sierra. El interior, sin embargo, apuesta por una distribución abierta, en la que desaparece el ambiente costreñido tan característico de los adosados.

Pero las edificaciones que se presentan al concurso son de utilidad dispar. Así que el jurado, desde la última edición, ha decidido conceder otro primer premio a las obras de equipamiento. En este apartado, se ha apostado tanto por la calidad arquitectónica del proyecto como por la voluntad de dignificación de las instituciones, en este caso la Ertzaintza, que ha establecido en el municipio vizcaíno de Erandio una de sus sedes principales.

Entre todas las edificaciones de este complejo que se presentaban a concurso, ha sido la ideada por Juan Coll Barreu para el Centro de Proceso de Datos y Comunicaciones la que ha obtenido este primer premio. Coll Barreu ha apostado por integrar (y hasta soterrar) en el paisaje un par de paralelepípedos unidos por un paso que están dedicados a labores internas de la policía vasca.

Destaca en este conjunto una torre destinada a las comunicaciones y otros servicios secundarios. Su construcción en cristal le ofrece una falsa fragilidad y, sobre todo, una transparencia con la que no rompe ese conjunto de edificaciones de planta baja.

El jurado también ha destacado con accésits otros proyectos, entre los que destacan el pabellón de acceso a Chillida-Leku, de Joaquín Montero, y un sorprendente centro de salud en Buñuel (Navarra), ideado por Javier Barcos y Manuel Enríquez.

La elección de estos premiados, entre las 49 propuestas presentadas, fue difícil. José Garitacelaya recuerda los tres intensos días que pasaron visitando todas las obras que entraron en la última fase: 'Fueron jornadas, sobre todo, de debate e intercambio de pareceres, ya que en el jurado participaban arquitectos que se mueven en la enseñanza, en la reflexión o en el propio ejercicio de la profesión'.

De aquellos encuentros, salió elegida en la modalidad de urbanismo ('aunque quizás se debería llamar urbanización', puntualiza Garitacelaya) la plaza del Ferial de Urroz (Navarra), a cargo de Fernando Tabuenca y Jesús Leache. Es una solución sencilla, pero muy respetuosa con este espacio que ha sido sede de las ferias ganaderas de toda la comarca. Por supuesto, se conserva el frontón y, con sutileza, se ha dignificado el acceso a la iglesia parroquial, gracias a unas sencillas escalinatas.

En el apartado de planeamiento, se ha valorado el trabajo que se viene realizando alrededor del Plan Municipal de Pamplona, mientras que en la modalidad de rehabilitación el premio se lo ha llevado la reforma de un frontón de trinquete particular, sito en la localidad guipuzcoana de Hondarribia.

En cuanto al interiorismo, la segunda sección en número de participantes, el premio ha recaído en el acondicionamiento de las oficinas Ize, en Deusto, a cargo de Luis María Uriarte. Entre otras virtudes, el jurado ha destacado en esta distribución de un espacio laboral el hecho de que se haya privilegiado la zona de luz natural para los puestos de trabajo, mientras que despachos y salas de reuniones pasan al interior del piso. Los alaveses Luis Zufiaur y Javier Bárcena han recibido una mención especial en esta sección por la reforma de un apartamento en Vitoria.

En fin, como resume su presindente, en la decisión final del jurado ha prevalecido en todo momento la conclusión siguiente: 'Queda demostrado que las soluciones más simples y sencillas son casi siempre las más valiosas'.

El poderío navarro

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