Bergara abre la vía a que la A-8 vuelva a manos privadas tras su explotación pública

El diputado de Vizcaya, Josu Bergara, reiteró ayer que 'en los próximos dos o tres años' se mantendrá el peaje de la autopista A-8 para evitar el colapso de la vía rápida que une Bilbao y Behobia.

Una vez termine la concesión de la misma a Europistas, que culmina en 2003, Bergara apuesta por la explotación pública de este vial, a través de una sociedad foral, 'aunque luego se privatizara', aseguró el diputado vizcaíno, abriendo la puerta a la posibilidad de que la explotación del vial pase en un futuro a manos privadas. La Diputación de Vizcaya planea además adjudicar a una empresa privada la conservación y el mantenimiento de la autopista, de 106 kilómetros de longitud, de los que 70 se encuentran en territorio guipuzcoano. Más de 300 personas trabajan en la actualidad en la autopista Bilbao-Behobia.

Bergara, quien acudió a la asamblea general que la patronal vizcaína Cebek celebró en el Palacio Euskalduna, habló también de fiscalidad. El máximo responsable foral señaló que Vizcaya trabaja en la modificación fiscal de varios impuestos. Entre ellos se encuentra el de Sociedades, cuya rebaja al 32,5% ha repercutido en 'una mayor generación de riqueza', explicó el diputado general, para añadir que es partidario de rebajar todavía más esta tasa.

No obstante, Bergara matizó que esta provincia no irá por libre y no realizará ninguna modificación sin consensuarla en el Órgano de Coordinación Tributaria, en el que están representados el Gobierno vasco y las tres diputaciones forales.