La ermita del Rosario
Escribo esta carta con el convencimiento de que todos aquéllos que sienten la llamada del Cabezo todos los finales de abril no pueden permanecer indiferentes ante el abandono de uno de los símbolos más secularmente enraizados con la devoción a la Virgen de la Cabeza. Me estoy refiriendo a la ermita del Rosario, sita en las proximidades del santuario de Sierra Morena, cuyo abandono ha sido denunciado en más de una ocasión. Para algunos romeros sensibles ha sido lamentable observar cómo la techumbre de la ermita se ha venido abajo, llevándose con ella la espadaña, hornacina y arco de la puerta de entrada. Esta construcción se debe al afán de un vecino de Bujalance, el clérigo Alonso de Rojas Toboso, que la edificó a principios del siglo XVII para retirarse en ella, como ermitaño. Desde esa época, la ermita ha estado muy unida al santuario y a la Cofradía Matriz de Andújar.
Hay que tener en cuenta que es la única ermita que se conserva de las muchas que existieron en el camino ascendente hacia la Morenita desde Andújar. Lanzo un mensaje desde estas páginas para que todos (peñas romeras, Cofradía Matriz, comunidad de PP, trinitarios, Ayuntamiento de Andújar, Junta de Andalucía, etcétera) se impliquen en la recuperación de este importantísimo hito romero. Si hace años el tesón de un grupo de peñistas recuperó para el futuro la ermita de San Ginés, ¿por qué no se puede hacer lo mismo con la ermita de la Virgen del Rosario?
Aún estamos a tiempo de evitar lo que sería una pérdida lamentable. ¡Salvemos la ermita del Rosario!
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