Chaves contrapone la gestión 'satisfactoria' de su Ejecutivo a la 'bochornosa' oposición del PP

El análisis del primer año de legislatura consumió el desarrollo del pleno de la ejecutiva del PSOE de Andalucía, que se celebró en la sede de la agrupación de Córdoba. Chaves destacó los datos económicos alcanzados por la comunidad en este periodo, especialmente los relativos al empleo (111.000 parados menos) y su contribución al conjunto nacional (el 43% de la reducción total). Tanto en la dirección socialista como en la conferencia de prensa posterior, el secretario general del PSOE defendió la labor del Gobierno, aunque sin caer en el triunfalismo.

No hubo intervenciones reclamando mayor impulso a los consejeros, como sí ocurrió en la ejecutiva que se celebró a principios de marzo en Málaga sin la presencia de Chaves, aunque algunos apuntaron la necesidad de poner un mayor énfasis en la venta de la gestión del Gobierno autónomo, según fuentes socialistas.

La mayoría de los dirigentes suscribieron lo dicho por el presidente andaluz acerca de la estrategia de crispación, de enfrentamiento y de 'hipocresía' que desarrolla el Partido Popular. En este sentido, Chaves aseguró que son los conservadores los que 'no dejan el más mínimo resquicio' para el consenso y tan sólo salvó de esta falta de progreso a las lentas negociaciones sobre las cajas de ahorros.

El presidente andaluz recordó que 'no ha habido ningún avance' en el desbloqueo de los cuatro temas acordados con José María Aznar en la entrevista que celebradon ambos el 24 de mayo de 2000 en la Moncloa: 'A estas alturas, no hay un paso significativo en cuanto al censo, la financiación, las transferencias y las inversiones'. Pese a todo, Chaves no quiere, por el momento, 'tirar la toalla para intentar la negociación' y esperará a ver cómo se desarrollan las conversaciones para pactar el nuevo sistema de financiación autonómica para decidir si va a mantenerse a la espera de respuesta de los ministerios.

Los socialistas están especialmente molestos con la negativa a traspasar las políticas activas de empleo, cuando el acuerdo verbal estaba cerrado. Chaves la atribuyó a que 'la mano del PP andaluz es bastante alargada', y a que los populares están abonando el terreno para fijar a Andalucía como objetivo electoral. En esta línea se manifestaron en la reunión de la ejecutiva dirigentes como Luis Pizarro, Antonio Claret García, Manuel Gracia o Rafael Velasco, quienes opinan que, tras las elecciones en el País Vasco, el PP va a utilizar todos sus medios para poner en práctica en Andalucía una estrategia de crispación similar a la de aquella comunidad.

Manuel Chaves no verbalizó ante los periodistas esa comparación, pero sí vaticinó una campaña del PP 'con la cantinela de la inactividad del Gobierno'. El dirigente socialista no se cortó ni un pelo a la hora de criticar la oposición que ejerce el PP y, singularmente, su presidenta, Teófila Martínez, de quien los socialistas dicen que es un 'hazmerreír' (Gaspar Zarrías) y que se limita 'a hacer un preguntita cada 15 días en el Parlamento' (Luis Pizarro). Ayer Chaves añadió un puñado de calificativos como oposición 'bochornosa' y 'nada útil'.

Para el presidente andaluz, la 'falta de capacidad opositora, de iniciativa y de proyecto' de los populares la demuestra el que Martínez recurra 'al insulto' y la 'descalificación personal'. 'Es más una rémora del pasado', enfatizó.

Por el contrario, aseguró que su Gobierno había dado 'un fuerte impulso legislativo', habia adoptado medidas de gestión 'importantes' y en el terreno de la acción política había hecho 'política con mayúsculas'. Aludía a la posición adoptada por la Junta en asuntos con el submarino nuclear Tireless, la ampliación de Rota o la no renovación del acuerdo pesquero con Marruecos.

El presidente andaluz anunció para mayo la firma del acuerdo de concertación social con sindicatos y patronal y el envío de una carta a las tabaqueras para que paguen el coste sanitario por el tratamiento de las enfermades ocasionadas por el tabaco.