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El Gobierno desoye a la UE y mantiene bloqueado el Tribunal de Marcas

Justicia recibe presiones de otras autonomías

La obligación de que los estados miembros de la UE creen los tribunales de marcas se remonta a 1994, cuando se aprobó el reglamento de la marca comunitaria. Sin embargo, todavía hay varios países, entre ellos España, que no han tomado la decisión. En el caso español el acuerdo del Gobierno está pendiente de las conclusiones de una comisión interministerial de expertos, que estudia primero qué tipo de modelo, es decir, centralizado en una única demarcación, o bien varios tribunales en distintas comunidades autónomas. 'No hemos recibido ninguna amonestación por parte de la UE por este retraso, entre otras razones, porque los diferentes litigios de marcas que se plantean se están resolviendo de manera eficaz por la vía civil', señala el portavoz de Justicia. Pero sí hay advertencias, y serias, de Europa para que España no demore más la implantación del tribunal.

La ubicación del futuro Tribunal de Marcas estará directamente en función del modelo por el que finalmente se decida. 'Si se opta por un único tribunal, la elección de la sede dependerá, aparte de otros factores, del índice de conflictos jurídicos relacionados con las marcas en los distintos ámbitos territoriales, cuestión que es objeto de estudio por parte de la comisión interministerial de expertos', precisa el portavoz. Si finalmente se decide por un modelo descentralizado, el Ministerio de Justicia apunta que los tribunales de marcas se ubicarían en los tribunales superiores de justicia de las respectivas autonomías.

Además del número de litigios, el Gobierno también valorará otros aspectos, como la ubicación de la euroagencia de marcas, la Oficina de Armonizacción del Mercado Interior (OAMI) en Alicante, y el consiguiente entramado jurídico relacionado con la marca que se ha generado en los últimos años. Precisamente este dato y la explícita postura de los dirigentes de la OAMI a favor de que el tribunal se ubique en Alicante, son los argumentos esgrimidos por la Generalitat valenciana en su presión al Gobierno central para traer a la capital alicantina el órgano judicial.

En previsión un posible éxito en sus pretensiones, la Consejería de Justicia ya ha hecho la necesaria reserva de espacio en la nueva Ciudad de la Justicia de Alicante para albergar el Tribunal de Marcas. Sin embargo, el Ministerio de Justicia no oculta que, aparte del Consell, otros gobiernos autónomos también ejercen presión para llevarse a sus territorios el tribunal.

Y mientras el Gobierno resuelve el dilema del tribunal, la euroagencia mantiene su imparable ritmo de crecimiento, tanto en la petición de registros de marcas como de personal. Ello ha llevado a la OAMI a iniciar el proceso para la ampliación de la sede, inaugurada hace un año, y que ya se ha quedado pequeña.

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