Aumenta un 18% la cifra de inmigrantes detenidos en las costas

La entrada en vigor de una Ley de Extranjería calificada de 'dura' por partidos políticos y colectivos sociales no ha conseguido reducir el número de inmigrantes que ilegalmente intenta alcanzar las costas españolas en patera, al menos en el primer trimestre del año. El número de sin papeles detenidos durante estos tres meses ha aumentado en un 18% con respecto al mismo periodo del año anterior, según datos de la Delegación del Gobierno para la Extranjería y la Inmigración. El número de embarcaciones interceptadas también ha crecido, en un 10%, pasando de 145 a 158.

Durante el primer trimestre de este año fueron detenidos 2.687 inmigrantes, frente a los 2.226 del año anterior, de los que aproximadamente un 80% eran de origen magrebí y el resto subsaharianos. Sin embargo, otros no tuvieron tanta suerte. Los cinco naufragios contabilizados en el primer trimestre de 2000 se han triplicado en el primer trimestre de este año. El número de náufragos rescatados ha crecido aún más: de los 32 inmigrantes rescatados en alta mar registrados el año pasado se ha pasado a los 269 del primer trimestre de este año. Pero junto al número de rescatados también ha aumentado el de los cadáveres recuperados, que ha pasado de las 13 personas muertas en el mar en el primer trimestre de 2000 a las 25 de éste.

Propuesta sindical

Por otra parte, el Gobierno sigue adelante con la negociación de su borrador del Reglamento a la Ley de Extranjería. El sindicato CC OO presentó ayer su paquete de propuestas de modificación al borrador, la creación de un visado especial de entrada para los inmigrantes que llegan a España con intención de trabajar en el servicio doméstico y en el cuidado de personas dependientes.

Paloma López, responsable para temas de inmigración del sindicato, explicó la necesidad de dar un tratamiento diferente a estos trabajadores 'dadas las características especiales de contratación de este sector, que se basan en una relación de confianza'.

Según CC OO, en este tipo de trabajos el contratante tiene que conocer al empleado antes de formalizar un contrato, por lo que deberían quedar 'fuera de los cupos anuales de ofertas que se lanzan al exterior', aseguró López.

La propuesta sindical consiste en que estos trabajadores 'no tengan que volver a su país a formalizar un contrato si están en España y que los de fuera vengan no con un contrato, sino con un permiso temporal de entre 3 y 6 meses para buscar empleo es este sector'.

Para definir el número de permisos a otorgar, CC OO propone un estudio de la oferta de empleos de este tipo que se dan en España . En este sentido, el sindicato aludió también a la necesidad de revisar el criterio de 'situación nacional de empleo' para determinar el cupo de inmigrantes, una vez que 'este criterio es una verdadera espada de Damocles en la política de inmigración española, si no hay una preocupación por tener un conocimiento exhaustivo del mercado laboral'.

Mustafá Elmerabet, presidente del colectivo marroquí Atime, y Raúl Jimenez, portavoz de la asociación ecuatoriana Rumiñahui, han recibido la propuesta con cierta tibieza. Representantes de dos de los colectivos que, según López, más puestos cubren en el sector doméstico -junto a dominicanos, filipinos y peruanos- ven en la medida un parche al problema. Para Jiménez se trata de una 'solución parcial', mientras que Elmerabet destaca que 'no es algo nuevo, en Italia por ejemplo la política de inmigración sigue este patrón del visado de seis meses para buscar trabajo, y no sólo para este sector'.