Las operadoras admiten que no ofrecerán el móvil UMTS a tiempo

Los operadores de telefonía móvil han informado al Ministerio de Ciencia y Tecnología de que la falta de terminales impedirá que se cumpla el plazo oficial del próximo 1 de agosto para la puesta en servicio de la telefonía móvil multimedia (UMTS).

Las compañías remitieron ayer la respuesta al cuestionario remitido a finales de marzo por el departamento que dirige Anna Birulés, para conocer de primera mano si los operadores podrían comenzar a dar servicio comercial de UMTS de acuerdo a las condiciones fijadas en el concurso por el que se adjudicaron cuatro licencias en marzo de 2000 a Telefónica Móviles, Airtel, Amena y Xfera.

Todos los operadores consultados han coincidido en su respuesta en que, aunque para agosto próximo tendrán lista y desplegada la red mínima necesaria para cumplir los requisitos de cobertura en las mayores poblaciones, la ausencia en el mercado de terminales aptos para esta tecnología hará inviable la explotación comercial de la denominada telefonía de tercera generación, que permite la transmisión de vídeos y la navegación por Internet.

En cuanto a la segunda pregunta que les formulaba Ciencia y Tecnología sobre la fecha probable de esa puesta en marcha, los operadores apuntan al segundo semestre de 2002, de acuerdo a las previsiones realizadas por los distintos fabricantes para la disponibilidad masiva de terminales para atender la demanda comercial.

A la espera del concurso

Una vez que analice el cuestionario, Ciencia y Tecnología deberá adoptar importantes decisiones como las condiciones que regirán la convocatoria de un concurso para la concesión de dos nuevas licencias de telefonía móvil, la autorización para los operadores virtuales (sin red propia) o la rebaja de los compromisos a los que se obligaron los cuatro operadores que obtuvieron las licencias en marzo de 2000.

Aunque la puesta en marcha del servicio el próximo mes de agosto está garantizada por fuertes avales, el pliego de bases del concurso dejaba la puerta abierta para un retraso, ya que supeditaba el cumplimiento de los plazos a que se dieran las condiciones técnicas adecuadas.

Este retraso en la implantación del UMTS, que se hará extensivo a todos los países europeos, podría paliarse con el desarrollo de tecnologías intermedias de las que ya se dispone como el GPRS, que permite la navegación por Internet, aunque a menor velocidad.