Agricultura bloquea el ganado procedente de Francia por la fiebre aftosa

El Departamento de Agricultura ha inmovilizado todo el ganado procedente de Francia como medida para prevenir la extensión de la fiebre aftosa. La enfermedad apareció en el Reino Unido a mediados de febrero, pero ya ha saltado al continente con el descubrimiento de los primeros casos en el noroeste francés. La fiebre aftosa es muy contagiosa para los animales, a los que debilita, pero inofensiva para el hombre.

El departamento, en colaboración con las tres diputaciones forales, bloqueó desde primeras horas de la mañana de ayer todas las cabezas de ganado francés y los veterinarios están revisando su estado sanitario para comprobar si alguno de los animales está enfermo. El Gobierno ha puesto en marcha un dispositivo especial para evitar que uno de estos animales pueda cruzar la frontera y llegar hasta Euskadi. Aunque es la Guardia Civil la que tiene la competencia para vigilar la frontera, la Ertzaintza colabora junto al personal de Agricultura en el control de los vehículos de transporte de ganado llegados desde Francia a través del puesto fronterizo de Irún.

Además, la prohibición de celebrar concentraciones, mercados y ferias ganaderas se ha prorrogado hasta el próximo 29 de marzo.

Positivo confirmado

Por otra parte, el laboratorio de referencia para la encefalopatía espongiforme bovina (EEB), radicado en la Facultad de Veterinaria de Zaragoza, confirmó ayer el positivo registrado la pasada semana en el test de las vacas locas en una res criada en una explotación de Azpeitia (Guipúzcoa). La granja está intervenida por la Diputación guipuzcoana y sus veterinarios están analizando con qué tipo de piensos se alimentó el animal.

Precisamente, ayer se reunió el viceconsejero de Agricultura, Jon Arruti, con los productores y criadores de ganado vacuno y con los sindicatos para informarles de la marcha de la crisis de las vacas locas en el País Vasco. El departamento está analizando las cuantías para indemnizar en el caso de tener que sacrificar la totalidad de los animales si se detecta en la explotación una vaca afectada por la enfermedad. También sopesa no matar a todas las reses de la cabaña, aunque la normativa europea es tajante y exige el sacrificio masivo.

El sindicato EHNE, que también participó en el contacto, se mostró muy crítico con la Administración. Considera que el departamento no responde a las demandas del sector con medidas concretas de actuación y mantiene una actitud 'irresponsable' al no constituir una mesa de trabajo específica sobre el mal de las vacas locas con participación de los sectores afectados.

Mientras, la Organización deConsumidores de Euskadi expresó ayer su confianza en los controles realizados por el departamento para detectar el mal.