Elorza promete que regenerará dos barrios aun sin la ayuda del Gobierno

El alcalde de San Sebastián, el socialista Odón Elorza, se comprometió ayer a impulsar la regeneración de Alza y Loiola, dos de los barrios más desfavorecidos de la ciudad, con o sin la ayuda del Gobierno vasco. Las 19 actuaciones previstas para revitalizar ambas zonas, con un coste total de 3.436 millones de pesetas podrían ser financiadas en un 50% por el programa Izartu del Ejecutivo autónomo. 'En caso contrario', afirmó ayer el alcalde, 'me comprometo a buscar fórmulas para financiar los dos proyectos'. Advirtió, eso sí, de que no garantiza la misma rapidez en su desarrollo.

El Ayuntamiento presentó recientemente al citado programa dos planes integrales que alcanzan los 1.774 millones de pesetas en el caso de Alza y 1.662 en el de Loiola. Pero no será hasta el 28 de agosto cuando se conozca la resolución definitiva del Ejecutivo, que ha consignado una partida de 15.000 millones de pesetas para el desarrollo de este programa. Rentería también figura entre los municipios que ha pedido apoyo para la revitalización urbana de la Vaguada de Pontika-Arramendi, presupuestada en 2.092 millones de pesetas.

Ambos proyectos persiguen avanzar, según Elorza, en la construcción de un 'San Sebastián más cohesionado y equilibrado', con menos diferencias entre los barrios. Alza-Eskalantegi, que aglutina al 6,2% de la población donostiarra, tiene una densidad de viviendas por hectárea de 92,6 frente a las 80,05 de San Sebastián y padece 'problemas de pobreza y marginalidad social y entorno degradado', entre otras situaciones desfavorables.

El Ayuntamiento plantea como principales bazas para la revitalización de este barrio la regeneración de la regata de Molinao y el traslado de las industrias situadas en el corazón del barrio a polígonos industriales. El proyecto diseñado incluye además la creación de espacios libres y plazas, la mejora de la comunicación interna del barrio, la rehabilitación de edificios y la creación de aparcamientos y espacios peatonales, entre otras actuaciones.

Loiola

El proyecto de Loiola, barrio con 6.500 habitantes, es similar en cuanto a contenido. También basa su desarrollo en la rehabilitación de edificios, la creación de nuevos espacios públicos, la construcción de equipamientos sociales y aparcamientos. Una de las partidas más importantes se destinará a la realización del parque fluvial del Urumea, en la zona comprendida entre Loiola y Martutene.

En la presentación de ambos proyectos participaron ayer el concejal de Planeamiento Urbanístico, Jorge Letamendía (PSE-EE), y la delegada de Desarrollo Económico y Empleo, María San Gil, quien manifestó que estas actuaciones demuestran que 'el Ayuntamiento no trabaja de espaldas a los donostiarras'. Ambos proyectos cuentan con el apoyo de la mayoría de las asociaciones de vecinos de Alza y Loiola.