El Consell acusa a los socialistas de ir contra los intereses valencianos con su alternativa al PHN

'No entiendo cómo se puede cambiar tanto en tan poco tiempo porque los problemas siguen siendo los mismos', se lamentó ayer García Antón esgrimiendo el plan hidrológico que propusieron los socialistas en 1993, que preveía un trasvase desde el Ebro a lo largo de todo el litoral del Mediterráneo de hasta 4.000 hectómetros cúbicos, cuatro veces lo que propone el documento del PP que acaba de llegar al Congreso de los Diputados. Pese a que los propios socialistas han reconocido que han cambiado sus criterios y que ahora apuestan por otras políticas del agua, el consejero les recriminó su cambio de postura, olvidando así que el propio presidente del Gobierno y del PP, José María Aznar, afirmó hace menos años que ni una gota del Ebro se enviaría a otras regiones.

García Antón asumió el discurso predominante en su partido que asigna un sesgo antivalenciano a quien no apoye el trasvase. Calificó de 'ilógica' la postura del PSPV y añadió: 'Esta situación me produce preocupación, ya que cada vez se alejan [los socialistas] más de la defensa de los intereses de los valencianos y sobre todo por la falta de interés en defender las posturas de sus compañeros de partido en zonas como el Segura, el Vinalopó y el norte de Castellón'.

García Antón negó que el plan socialista sea más acorde a la nuevas políticas sostenibles del agua. A su juicio, el PHN del PP ya contempla estas medidas. 'No se descubre nada en este documento al proponer una política del agua basada en la depuración, reutilización, modernización de regadíos y ahorro de los recursos existentes además de la desalación, que perjudicaría seriamente al medio ambiente por la emisión de CO2'. Pese a esa supuesta emisión contaminante de dióxido de carbono, el consejero aseguró que el PP ya ha acometido programas para desalar hasta 100 hectómetros de agua en la Comunidad.

Este punto, el de la desalación, es otro de los sesgos que marca el PHN del Gobierno respecto a la realidad hidrológica de la Comunicad Valenciana ya que el documento oficial, que asigna 350 hectómetros a esta autonomía, no prevé que hay o habrá recursos desalados de hasta 100 hectómetros.

'Auténtico bodrio'

En esa contradicción también incurrió el portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Alejandro Font de Mora, que calificó la propuesta del PSPV como 'un auténtico bodrio sin pies ni cabeza, que se inspira en un desmarque claro de los planteamientos del Gobierno y se basa en la utopía'. Para el diputado, 'la alternativa de la desalación que propone el PSPV tiene un coste de más del doble del trasvase desde el Ebro y un enorme impacto medioambiental, produciendo unas emisiones de dióxido de carbono muy considerables e incrementando las emisiones de CO2 entre un 4,5% y un 14%'. No se sabe qué cifras maneja el PP, pero el documento de los socialistas habla de una desalación de un máximo de 80 hectómetros anuales, cifra menor a los planes del Consell.

La palabras de Font de Mora tuvieron respuesta. 'Es cierto que la desalación tiene unos costes energéticos, pero también es cierto que la proponemos en las zonas litorales del sur y a través del uso de energías renovables, como es la energía solar', explicó Joan Francesc Peris, del Grupo Socialistas-Progresistas, que centró el documento socialista en las tesis que propugna la UE.

El documento socialista no sólo provocó reacciones en el PP. La comisión mixta de la Cámara de Comercio de Alicante y la Confederación Empresarial de la Provincia de Alicante (Coepa) decidieron ayer convocar 'un acto multitudinario' de apoyo al PHN, que se celebrará el próximo día 22 en el Teatro Principal de Alicante. 'En este evento está prevista la presencia de empresarios de toda la provincia y de todos los sectores productivos, así como de distintas instituciones que han manifestado su preocupación por la falta de agua en la provincia de Alicante.