El número de profesores interinos creció un 26% el año pasado y se eleva ya a 10.466

La Consejería de Educación, que dirige Manuel Tarancón, inicia hoy la negociación de uno de los temas más espinosos del sector educativo: una oferta de puestos de trabajo que garantice estabilidad y permita frenar de forma gradual la precariedad laboral acumulada en el último quinquenio. Sólo en el último año, la interinidad docente creció a un ritmo del 26%, lo que elevó la cifra a un total de 10.466 profesores interinos, según el análisis de las actas oficiales realizado por Fete-UGT. Para revertir esta situación, el sindicato pidió ayer la convocatoria de 2.900 plazas nuevas este año.

El análisis de las actas oficiales sobre cómo se han cubierto los puestos docentes (tanto por especialidades como por tramos educativos) muestra con tozudez que las políticas de personal y las políticas de construcciones escolares de la Consejería de Educación no han caminado de manera acompasada en el último quinquenio. Las cifras muestran que en este momento el resultado del desajuste interno ha dejado un saldo de cerca de 3.000 profesores interinos más, lo que representa un ritmo de crecimiento anual del 26,4%.

Así mientras el 1 de septiembre de 1999 el número de plazas vacantes cubiertas con profesores interinos era de 7.700, el 1 noviembre del 2000 el número se había elevado a 10.466 interinos, es decir, en sólo un año se incorporaron 2.766 empleados en precario. Gonzalo Castillo, secretario general de la federación de enseñanza de UGT, pedirá hoy en la constitución de la mesa sectorial de Educación, que abrirá la negociación de la oferta de empleo público docente para el año 2001, 'la convocatoria de 2.900 plazas nuevas para poder cubrir las necesidades de la aplicación del Acuerdo de Plantillas de Primaria y Secundaria, firmado por la Administración valenciana'. Castillo puntualizó que con los datos oficiales en la mano -es decir, la suma de vacantes a tiempo parcial y vacantes puras de los cuerpos de profesores de Primaria, Secundaria, Formación Profesional, técnicos de taller, profesores de las escuelas de Artes y Oficios y de las de Música y Artes Escénicas- 'en la actualidad entre el 25% y el 30% de los 40.000 profesores que conforman la plantilla docente de la Comunidad está desarrollando su actividad en precario'.

Desajuste presupuestario

Los costes de esta situación afectan en primer orden a la Generalitat, 'que de año en año se ve obligada a realizar continuas modificaciones a los presupuestos anuales para cubrir el sobrecoste de la nómina de personal de la Administración'. Según Castillo, la interinidad encarece la cotización a la Seguridad Social de cada profesor en casi un millón más al año por encima del precio fijado por la Mutualidad de Funcionarios del Estado (Muface). '¿Por qué no se están creando puestos de trabajo estables?', se preguntó el secretario general de Fete-UGT. 'Porque no se han adecuado y contruido a tiempo los centros escolares programados en el mapa escolar', sostiene.

A este factor clave, el sindicato añade otros, como el hecho de que pese haberse aprobado el decreto de Enseñanzas de Música y Artes Escénicas, en este cuerpo de profesores no se hayan convocado oposiciones desde la llegada del PP al Consell en 1995, lo que hace que el 80% de la plantilla (420 profesores de estas enseñanzas) esté trabajando en precario. La situación se agrava en el sector del cuerpo de maestros que se han visto obligados a cubrir los puestos docentes de Secundaria en el 60% de colegios de la Comunidad, ante la imposibilidad de trasladar a los alumnos a institutos, debido al retraso en las obras de construcción de los centros previstos en 1996.

En este escenario, el responsable de Educación se enfrenta a unas negociaciones donde las centrales de izquierda UGT y CC OO y los sindicatos tradicionalmente más afines a la política oficial ANPE y CSIF han cerrado filas y rechazan la propuesta inicial de Tarancón de ofertar sólo 2.000 plazas para este año. El objetivo común es que el Gobierno acceda a modificar el decreto de acceso a la función pública, pero mientras eso no suceda la negociación de las condiciones laborales del sector educativo se complican. El Sindicat de Treballador de l'Ensenyament (STEPV), mayoritario en la enseñanza no universitaria, anunció ayer por separado que 'ha iniciado una serie de actuaciones para presionar a la Generalitat a que acceda a negociar medidas para garantizar el acceso del profesorado interino a un puesto de trabajo estable'.

De entrada, el sindicato ha convocado una manifestación en Valencia para el próximo sábado y mantiene su propuesta de huelga, prevista para los primeros días de marzo, bajo el lema 'Enseñanza pública, trabajo estable'. Su principal exigencia es una reforma legal que permita el acceso diferenciado del profesorado interino a la función pública, un punto en que el resto de sindicatos mantiene posiciones diferenciadas. Según fuentes oficiales, Tarancón abre la negociación con el sector educativo, uno de los más beligerantes, con la 'firme voluntad de alcanzar un consenso' respecto a la oferta de empleo, pero tendrá que demostrar antes que los cambios en varias direcciones generales han puesto fin a las divergencias políticas que azotaron el último año.