Enron tiene una alternativa para la térmica de Móra, en Tordesillas

Enron tiene un emplazamiento alternativo para la construcción de la central térmica de ciclo combinado de gas. Las poblaciones de Móra la Nova (Ribera d'Ebre) y Arcos de la Frontera (Cádiz) fueron las primeras elegidas por la empresa norteamericana, pero ésta se guardaba un as en la manga por si fallaba alguna de las dos: Tordesillas (Valladolid). El emplazamiento de reserva de Enron fue revelado ayer a las plataformas ecologistas.

Los estudios previos de la empresa norteamericana para la instalación de una central combinada de gas de 1.600 megavatios ya preveían la posibilidad de que existieran problemas en su ubicación, y la compañía se curó en salud buscando un emplazamiento alternativo.

La población de Tordesillas (Valladolid), con unos 8.000 habitantes, ofrece las mismas posibilidades que Móra la Nova para la utilización de agua, necesaria para la producción energética. Tordesillas es una población ribereña del Duero, como Móra lo es del Ebro. El Gobierno catalán, a la vista de la oposición ciudadana a la ubicación de la central térmica en la comarca de la Ribera d'Ebre (reunió a 25.000 personas en una manifestación celebrada el pasado 4 de febrero en Móra d'Ebre), busca emplazamientos alternativos dentro de la propia comunidad autónoma para evitar que la inversión se le escape de las manos. En este sentido, se habla de alguna población del Baix Llobregat, y otros alcaldes de los municipios ribereños de Tarragona ya han ofrecido su colaboración.

La inversión de Enron y la oposición que ha supuesto, con la formación de multitudinarias plataformas ciudadanas, han suscitado una operación gubernamental nunca vista desde la transición: el conseller en cap, Artur Mas, abrió un debate ciudadano sobre 'el modelo económico que seguir en las comarcas del Ebro' nunca visto hasta ahora. El propio presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, explicó ayer que, hasta el anuncio de la implantación de la empresa, 'el modelo de crecimiento de la Generalitat ha sido positivo, como se reclama ahora'.

El proyecto de la térmica prevé cuatro chimeneas de más de cien metros de altura al lado del río Ebro, en un tramo que se pretende navegable para turistas y pescadores. Las plataformas ciudadanas insisten en que las comarcas del Ebro han sido capaces de avanzar gracias a su propia iniciativa y recuerdan que los grandes proyectos energéticos, como los de las nucleares, únicamente han servido para que los municipios se encuentren con un 'monocultivo energético muy difícil de superar'.

Las plataformas ciudadanas son un fenómeno surgido en los últimos meses en las comarcas del Ebro a raíz de la oposición a proyectos institucionales o privados, como el de Enron, el Mapa Eólico de Cataluña y el Plan Hidrológico Nacional.

A este respecto, el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, avanzó que el número de miembros de las plataformas no sería óbice para un cambio en la postura del Gobierno y defendió las alegaciones de la Generalitat como las únicas coherentes, por 'decir las mismas cosas en Cataluña y en Madrid'.