Caos médico

Me llamo Patricia Ordóñez e ingresé en el Hospital Doctor Peset de Valencia tras sufrir mareos y dos desmayos. Debía ingresar en Neurología, en la cuarta planta, pero como no habían camas me colocaron en Oncología.

Como ya tengo 15 años no podía estar en Pediatría y me tocó de compañera de habitación una mujer de 87 años. Digamos que el problema no era ella sino su hijo. Cuando le quitaba el pañal a su madre lo dejaba tirado por la habitación, si pasaba al baño de la sala ni se molestaba en tirar de la cadena; esto y muchas cosas más. Mi madre solicitó otra habitación o por lo menos que le llamasen la atención, pero en Atención al cliente respondieron que no podían hacer nada.

Una de las pruebas que me tenían que hacer era una resonancia. El día que me la iban a realizar me avisaron que el aparato del hospital estaba estropeado, entonces me dijeron que una ambulancia se encargaría de llevarme a Eresa, el único lugar donde me la podían realizar, pero que ya me tenía que esperar al día siguiente. Este día era el que me iban a realizar todas las pruebas.

Tenía la resonancia a las 14.30 horas, con lo cual la ambulancia vendría a por mí a las 14.00. Resultó que vino a las 13.35 y cuando llegué a Eresa me dijeron que hasta las 15.00 horas no me tocaba. Así pasó con varios pacientes de diferentes hospitales. Después de realizarme la prueba llamaron a la ambulancia, que tardó casi dos horas en venir. Yo, mientras tanto, sentada en una silla, mareada y con dolor de cabeza. Igual con otros pacientes.

Al día siguiente se suponía que pasaría el doctor a darme los resultados y el alta. Pero resultó que tuve que esperar hasta las tres ya que los de Eresa no mandaban el resultado de la prueba. Hay poca coordinación entre los hospitales o, en este caso, en esta empresa. -