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COMUNICACIÓN

La aventura española del magnate y la cadena americana

Rosario G. Gómez

España no es ajena a la visión planetaria de la televisión que siempre ha tenido Rupert Murdoch. Los primeros intentos por entrar en el mercado doméstico los realizó el magnate de la comunicación a finales de los años ochenta, cuando a través de News Corporation participó en la creación de la sociedad Univisión Canal 1, que aspiraba a uno de los tres canales de televisión privada que concedió el Gobierno en 1989. En aquella ocasión, Murdoch acudía al concurso de la mano del Grupo Zeta, principal socio español de Univisión Canal 1.

Finalmente, este consorcio no obtuvo licencia y en 1992, la sociedad Renvir (constituida por Murdoch y Antonio Asensio, presidente del Grupo Zeta) tomó el 25% de las acciones de Antena 3. Cinco años más tarde, la cadena privada fue comprada por Telefónica.

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Por su lado, DirecTV, el líder mundial de la televisión de pago por satélite, intentó abrirse paso en el negocio de la televisión digital por satélite en España cuando esta tecnología estaba en fase de alumbramiento.

En 1996, DirecTV mantuvo contactos con Sogecable para participar en el lanzamiento de una plataforma digital, pero las negociaciones no prosperaron. La compañía de origen norteamericano volvió entonces sus ojos hacia Vía Digital, el proyecto alentado por Radiotelevisión Española y Televisiva y finalmente comandado por Telefónica Media.

Tras múltiples reajustes accionariales, Direct TV posee el 6,9% de las acciones de Vía Digital a través de la sociedad Galaxi Latin America. Esta compañía nació para trasladar los servicios de televisión digital por satélite al mercado de habla hispana y portuguesa.

Desde su posición de socio mayoritario, Telefónica lleva el peso de la gestión de Vía Digital, pero la filial de General Motors aporta experiencia en el terreno de la televisión digital, un negocio nuevo para la operadora de telecomunicaciones española.

Pese a contar con un socio tan implantado en el terreno de la televisión de pago, Vía Digital no termina de despegar. Actualmente tiene alrededor de 600.000 abonados. Vía Digital está embarcada en el desarrollo de nuevos servicios interactivos, como es el acceso a Internet a través de la pantalla.

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