La Comisión calcula que Europa necesita 1,6 millones de empleos en nuevas tecnologías

Bruselas considera que ha llegado el momento de 'pasar a la acción' y de reducir distancias con Estados Unidos. 'No podemos perder credibilidad ante los contribuyentes europeos', declaró Prodi, al recordar, por ejemplo, que en la cumbre de Lisboa del año pasado se fijó la meta de alcanzar el pleno empleo en la UE en 2010 y de extender el uso de las nuevas tecnologías a todos los niveles.

Así, comentó que en los últimos tres años se han creado 2,5 millones de nuevos puestos de trabajo en la UE, pero que aún hay 14 millones de parados. 'El pleno empleo está en nuestras manos', dijo, si bien reconoció que la Unión necesitará, especialmente, expertos que conozcan bien las nuevas herramientas laborales. Prodi recordó igualmente que está previsto que todas las escuelas y colegios de la UE estén conectados por Internet en 2002, pero que también deben incluirse las nuevas tecnologías en los programas de enseñanza y, por tanto, es necesario contar con profesores cualificados.

Ante la cumbre de Estocolmo, la Comisión, como explicó ayer Prodi, se ha marcado el siguiente decálogo de objetivos:

- Empleo: Para lograrlo, los Gobiernos deben esforzarse especialmente en crear puestos de trabajo, con los correspondientes incentivos fiscales, para mujeres y personas de avanzada edad, así como en fomentar empleos de calidad.

- Movilidad: Hay que fomentar 'un mercado de trabajo verdaderamente europeo', en el que la movilidad de los empleados no suponga traba alguna. Para ello, debe haber un reconocimiento entre los Quince de los respectivos derechos de Seguridad Social y de pensiones.

- Mercado interior: El mercado interior de bienes y servicios debe avanzar para ser más competitivos. Los servicios suponen las tres cuartas partes del producto europeo, pero deben ser a precios más bajos y de mayor calidad. Los sectores de la electricidad y el gas, o la gestión del espacio aéreo deben abrirse más a la competencia.

- Mercado financiero: Debe garantizarse el acceso de las empresas europeas a inversiones en proyectos de países terceros. Hay que avanzar en el proyecto de crear un mercado financiero único en la UE.

- Leyes más simples: Para lograr que Europa sea la región más competitiva del mundo, hay que simplificar y modernizar las legislaciones 'a todos los niveles de poder'.

- e-Europa: Este mismo año hay que aprobar una nueva reglamentación para el sector de las telecomunicaciones, de forma que se supriman los obstáculos para acceder a las nuevas tecnologías y al comercio electrónico.

- Puestos cualificados: Hay que fomentar el uso de la tecnología de la información. A la vez, debe abordarse 'una política de inmigración más abierta' para acoger mano de obra cualificada y especializada.

- Investigación: Los esfuerzos en investigación en la Unión continúan 'fragmentados'. Debe crearse 'un espacio europeo de investigación'.

- Tecnologías de vanguardia: La llave del futuro europeo reside en la creación de esas nuevas empresas de alta tecnología que garantizarán el crecimiento y el empleo en la UE.

- Envejecimiento: Es 'inaceptable' el nivel de pobreza y exclusión social que aún existe en Europa. Pero, además, el envejecimiento de la población europea agravará el problema de las pensiones y de las prestaciones sanitarias, por lo que es imprescindible un plan de acción conjunto en toda la UE.