Los bailarines amenazan con paralizar las compañías nacionales de danza

El comité de huelga de los ballets nacionales convocó ayer a los medios de comunicación para expresar su rechazo al preacuerdo firmado por los grupos de trabajo de la Civea (Comisión de Interpretación, Vigilancia, Estudio y Aplicación), integrados por la Administración y los sindicatos CSIF -que ha hecho constar su rechazo a la desprotección de categoría con que quedan los bailarines con respecto a su reciclaje, la homologación y la equiparación salarial-, UGT y CC OO. Los rumores y temores a una posible privatización de las compañías sobrevolaban ayer en la reunión.

Lo primero que dejó claro el comité de huelga es que han coincidido dos crisis de muy distinto significado. Por una parte, la del Convenio Único, y, por otra, las reclamaciones de un colectivo de bailarines del BNE a su directora, Aída Gómez. Esta intención de separar las dos situaciones de crisis queda plasmada en el documento que firmaron todos, menos uno, en Lisboa, cuando se suspendió la función en el Auditorio de Belem el pasado sábado. Respecto a la crisis del BNE, el director del Inaem, Andrés Amorós, declaró ayer a Efe que 'al día de hoy' no estaba en su ánimo destituir a Aída Gómez. 'Al día de mañana, no sé', añadió Amorós.

Desprotegidos

Jesús Florencio, bailarín solista del BNE, leyó un comunicado y recalcó que el convenio en su redacción actual deja desprotegidos a los bailarines. Entre otros puntos, se reclama que, a efectos del reciclaje de los bailarines en otras actividades cuando acaba su vida escénica, se llegue a acuerdos concretos con las comunidades autónomas competentes en el área de la docencia; que en lo económico, el acuerdo de integración plena sea para los bailarines desde el 1 de enero de 1999 (como ha sido para todo el personal laboral de la Administración) y no desde la misma fecha de 2000; dar cabida en la categoría de músicos a los pianistas y guitarristas; y la incorporación al grupo profesional 1 de todo el personal artístico.

Carlos Guerrero, técnico del BNE, expresó que ayer ya hubo un paro de 12.00 a 14.00 y relató que el BNE viajó a Lisboa a sabiendas del paro anunciado: 'El estado actual de cosas puede llegar a paralizar las dos compañías nacionales, la bolsa de 80 horas extraordinarias que ofrece el Convenio Único son insuficientes para nuestro ritmo de trabajo. De no llegar a un acuerdo, los paros continuarán indefinidamente'.

Luis Martín Oya, bailarín de la Compañía Nacional de Danza, contó cómo Nacho Duato, director artístico de la CND, asumió en Sydney, donde la compañía estaba de gira, el compromiso de hablar con las autoridades de Cultura para intentar desbloquear la crisis. Duato se ha solidarizado así con las reclamaciones de la casi totalidad de la plantilla de las dos compañías estatales. Ayer, el comité de huelga pidió a Aída Gómez que adoptara la misma postura y por la tarde la directora del BNE emitió un comunicado en el que se ponía a disposición de ambas partes negociadoras.