El Ayuntamiento se querella contra la empresa que 'simuló' cursos a presos

Peydró convocó ayer una confererencia de prensa ante la 'alarma' que le había suscitado la noticia publicada en este periódico sobre unos supuestos cursos financiados con fondos europeos para formar a presos que, según Instituciones Penitenciarias, no se habían impartido en las prisiones madrileñas. Al menos 28 cursos para presos que facturó la empresa Ifomar, participada por afiliados al PP, entre los años 1997 a 1999 no constaban en los archivos de Instituciones Penitenciarias.

El gerente del Imefe se puso en contacto con Instituciones Penitenciarias para aclarar este asunto. Y tanto desde la dirección general como desde los propios centros donde supuestamente se habían impartido los cursos confirmaron que no tenían conocimiento de muchos de los cursos que el Imefe había pagado. 'No sé si en todos los casos, pero hay indicios racionales de que no fueron ejecutados todos los cursos presupuestados. Con que solo uno de estos cursos no se hubiera celebrado, este instituto entiende que se ha engañado, con los certificados y la relación de alumnos.'

Peydró confirmó ayer que los certificados de inicio y terminación de los cursos sospechosos se había falseado. Y ahí surgía el doble delito: no sólo no se había prestado el servicio para el que la empresa fue contratada con dinero público, por lo que se cometía 'un delito de estafa al Imefe'. La empresa, supuestamente, había mentido en documento público al entregar la memoria justificativa del curso, ya que se falseó el inicio, la terminación, y hasta el propio listado de alumnos.

Peydró admitió: 'Nos han engañado. Si esto ha ocurrido, algo ha fallado'. Informó que aunque los responsables de esta empresa les habían asegurado telefónicamente que habían impartido todos los cursos, no se habían presentado a una reunión con los directivos del Imefe. Peydro detalló ayer que Ifomar había facturado 123 millones de 1996 a 1999, en su mayoría (57%), adjudicaciones a dedo, aunque siempre el Imefe pedía más de una oferta, 'y no a empresas de su grupo'. Peydró reconoce que a veces, Ifomar era la única que licitó.

Para evitar más sorpresas, Peydro revisará los expedientes de esta empresa y de su grupo (Defoco, Incof y Prevecón), que ya habían sido objeto de sanción por ocultar reducciones en el número de alumnos, y del resto de sociedades.