Mas asegura que la línea 9 del metro se licitará esta legislatura pero no explica cómo se financiará
El conseller en cap, Artur Mas, se estrenó ayer en una nueva faceta, la de las primeras piedras. Fue en el metro ligero de Nou Barris, el que debe unir Trinitat Nova con el barrio de Can Cuiàs, en Montcada i Reixac. Mas aprovechó para anunciar que el Gobierno catalán tiene intención de adjudicar toda la línea 9 del metro, al completo, durante la actual legislatura. El conseller en cap eludió, en cambio, precisar de qué manera piensa financiar una obra que supone una inversión de más de 200.000 millones de pesetas, para la que ahora sólo hay presupuestados 60.000.
Artur Mas, acompañado en todo momento por el consejero de Política Territorial y Obras Públicas, Pere Macias, hizo hincapié en la intención de la Generalitat de acelerar en los próximos años una serie de proyectos que mejorarán sustancialmente el transporte público, entre ellos la línea 9 del metro. Menos explícito se mostró al referirse a su financiación, a la que restó importancia. Reconoció que aún se están estudiando distintas fórmulas que permitan sufragar su coste y no únicamente la que se deriva de la concesión de un crédito de 110.000 millones del Banco Europeo de Inversiones (BEI).
No es casual que uno de los primeros actos públicos de Mas desde que accedió al cargo haya tenido como escenario Nou Barris y que esté relacionado con unas obras del metro. El conseller en cap se encargó ayer de destacar la importancia que tiene para el Gobierno catalán esa parte de la ciudad y todo lo relacionado con el metro.
La línea 9 de este medio de transporte tendrá en un extremo dos ramales: uno en Santa Coloma de Gramenet y otro en Badalona, llegará hasta el aeropuerto del Prat y permitirá a los usuarios enlazar con todas las demás líneas de la red metropolitana. De momento, lo que ya está proyectado es el arranque de esa línea desde Badalona-Santa Coloma hasta la Sagrera, trazado que costará 60.000 millones de pesetas.
Mas efectuó las declaraciones durante la visita que hizo ayer al barrio barcelonés de Trinitat Nova (Nou Barris) para colocar la primera piedra del metro ligero que unirá este barrio con los más periféricos de la ciudad: Vallbona,Torre Baró,Ciutat Meridiana y Can Cuiàs (Montcada i Reixac), con una población de 11.000 habitantes. La Generalitat invertirá 6.500 millones de pesetas en este proyecto cuyas obras está previsto que acaben a finales de 2002 o principios de 2003.
La de ayer fue una primera piedra a la que no asistió, como suele ser habitual en las grandes infraestructuras de Barcelona, ni el alcalde, Joan Clos, ni el primer teniente de alcalde, Xavier Casas. El consistorio barcelonés tuvo conocimiento a última hora del jueves del acto. Finalmente acudió el concejal de Nou Barris, Manolo Pérez.
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