Descalzos pintan zapatos

La Organización para el Genoma Humano tiene un proyecto cuyo objetivo es tomar muestras de sangre y tejido de unos 722 pueblos indígenas de todo el mundo cuyos resultados estarán a disposición de las industrias biotecnológicas. Las muestras se recogen, según afirma la ONG Watu Acción Indígena, camufladas como ayuda al sector sanitario de estas comunidades. Las compañías madereras, los buscadores de oro, las empresas farmacéuticas, muchos gobiernos y numerosas agencias turísticas también están dispuestas a continuar la larga tradición de expolio, y en ocasiones genocidio, de las culturas indígenas. Lo que sorprende es que estos y otros datos aparecen no en un estudio de denuncia, sino en un catálogo de una exposición de zapatos.

Se presenta hasta el 4 de febrero en el FAD, en su nueva sede del Convent dels Àngels, un espectacular, aunque sencillo, montaje de luces que se titula Zapatos y arte indígena, y su imagen anunciadora son los pies desnudos de un indígena. La exposición consiste en zapatos de la firma Camper, patrocinadora del evento, que artesanos de 18 pueblos indígenas de Asia, Oceanía, África y América han decorado a partir de sus tradiciones artísticas propias. 'La exposición tiene un doble objetivo', afirma Lorenzo Fluxà, presidente de la firma zapatera mallorquina. 'Uno, y no lo negamos, es la promoción de la empresa; el otro es dar la oportunidad de que la problemática de los pueblos indígenas sea de actualidad'. Para arropar la presentación de la exposición y su catálogo con este objetivo humanitario, acudieron a su presentación Diego Azqueta, presidente de la ONG Watu Acción Indígena, y Julian Burger, funcionario responsable del programa de Pueblos Indígenas de la oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.

'Cualquier método que pueda servir para denunciar los problemas enormes que tienen las 5.000 culturas y los 280 millones de personas que integran los pueblos indígenas es válido', afirmó Azqueta. 'Hay muchas empresas que utilizan de forma inmoral a los indígenas y pensamos que éste no es el caso. Si podemos aprovecharnos de Camper, mucho mejor porque nuestra obligación es divulgar y sensibilizar'. Azqueta afirmó que Camper se ha comprometido a patrocinar la realización de una base de datos que reúna toda la documentación existente sobre los pueblos indígenas, que en la actualidad se halla dispersa en múltiples publicaciones. En la realización de este fichero, que en principio se hará en Internet, se invertirán unos tres años y aún no se ha calculado la cuantía del proyecto. 'Soy el primer interesado en saber cuánto costará', afirmó Fluxà.

Julian Burger, por su parte, afirmó que en los últimos 15 años ha habido un avance en las revindicaciones de los pueblos indígenas. Al menos, aseguró, se han organizado y su voz empieza a ser oída, aunque de forma leve, en los foros internacionales.

La exposición en sí misma de lo único que da cuenta es de la belleza de algunos trabajos artesanales de estos pueblos. La reivindicación hay que buscarla en las últimas páginas del bonito catálogo.