El Ballet de Víctor Ullate estrena en el Arriaga las coreografías 'Gogh' y 'Musa'

El zaragozano Víctor Ullate dejó de bailar cuando tenía 34 años, pero hoy en día continúa prestando su imagen y sus decisiones a su propia compañía de danza, aunque es Eduardo Lao quien ejerce como director artístico. Tras mostrar sus habilidades en Cannes, su cuerpo de baile recala ahora en el Teatro Arriaga de Bilbao para mostrar cinco coreografías, entre las que se encuentran dos estrenos: Gogh y Musa. En total ofrecerá cuatro representaciones, y dos programas distintos, entre mañana (20.00) y el próximo domingo.

Mañana y el viernes el público podrá contemplar como plato fuerte de sendas veladas Gogh, creación de Eduardo Lao basada en la vida y la obra del pintor holandés Vincent van Gogh. Se trata de un ballet centrado en dos personajes relevantes e influyentes en la vida del pintor holandés, su mujer y su hermano, y en el color negro que le obsesionó. Según Ullate, es una 'unión de música, danza, color y escenografía', coproducida por el Teatro Arriaga y amenizada por música compuesta por Pedro Navarrete.

También se pondrán en escena Seguiriya, que completa la trilogía que abrieron Arraigo y Jaleos, 'siguiendo la investigación dentro de la danza flamenca', y L'après midi d'un faune. Este paso a dos se creo en su día para Ruth Miró y Eduardo Lao, sustituido ahora por Víctor Jiménez.

El sábado y el domingo, el Ballet de Víctor Ullate ofrecerá un programa diferente compuesto por Gogh, Seguiriya, Itu... ¿bailas?, pieza dedicada a Luis Iturri, y otro estreno: Musa. Este nombre recibe un solo creado por Ullate para Ruth Miró y que recrea el 'juego' que se produce entre el bailarín y la barra, su pareja de baile. En este caso la orquesta Bilbao Philarmonia, dirigida por Gorka Sierra, guardará silencio y sonará 'música enlatada', ya que se precisan sones tradicionales hindúes.

Ritmos orientales también guiarán los pasos de un plantel de bailarines reducido a 24 componentes. 'Hemos tenido que suprimir gente porque no daba para más. Es decir los clásicos, El Quijote para ser más exacto, nos arruinó en su momento y hemos estado dos años muy mal, debiendo mucho dinero y pasándolo fatal'. La referida experiencia ha llevado a Ullate y Lao a la siguiente conclusión: 'Hay que estar con los pies en la tierra y tener en cuenta que si tienes cinco no hay que gastar siete, porque entonces te vienes abajo'. A la vez, el coreógrafo se queja de unos impuestos que le gravan 'como si fuese una empresa que vende otro tipo de cosas, no arte' y de que hay 'escasez de hombres en la danza'.

Para paliar en parte tal carencia, entre los proyectos de la Fundación para la Danza Víctor Ullate figura crear un 'gran centro de arte' en la localidad madrileña de Alcobendas. Está previsto que se levante con ayudas de la Comunidad de Madrid y de varias empresas privadas, y que en sus tres plantas más de 300 alumnos puedan instruirse en danza, Bachiller Artístico, Historia del Arte, música, canto, arte dramático, escultura y pintura. Las instalaciones se ubicarán sobre lo hoy es aún un solar de 4.000 metros cuadrados.