Reparada la calefacción de un colegio majariego tras un día de cierre

El colegio público El Tejar, situado en la calle Romero de Majadahonda, permaneció cerrado ayer por tener el sistema de calefacción estropeado desde el pasado 1 de noviembre, a pesar de ser una instalación nueva. Fue el último día sin calor. Ayer, técnicos del Ayuntamiento dieron con el origen de la avería y lo subsanaron.

Tanto el claustro de profesores como la junta directiva de la Asociación de Padres de Alumnos (APA) habían decidido, ante la falta de soluciones por parte de los servicios técnicos municipales, cerrar el colegio hasta que se solventara el problema. Según Mercedes Cruz, presidenta de la APA, la gota que colmó el vaso fue la vuelta al colegio después de las vacaciones de Navidad. 'Los niños estuvieron con el abrigo puesto en clase', puntualiza. El Ayuntamiento les había prometido un arreglo definitivo de la caldera en las vacaciones, pero el 8 de enero las aulas seguían heladas. El lunes, día 9, nevaba en la calle. 'Dentro, las condiciones eran imposibles para dar o recibir clase; por este motivo tomamos esta determinación, que puede parecer drástica', dice Cruz. A El Tejar asisten niños de tres a 13 años.

Los padres han apoyado la decisión tomada, según la dirección de El Tejar. Sólo cuatro niños fueron ayer al colegio, donde realizaron actividades hasta la hora de salida habitual, las 16.30.

Solución en ocho horas

Desde la dirección de El Tejar confirman que la avería está solucionada, pero indican que lo increíble es que 'con un puñetazo en la mesa todo se agilice'. Cuando el pasado 22 de diciembre se personaron en el colegio los servicios técnicos del Ayuntamiento con el inspector de Industria de la Comunidad de Madrid, la directora del centro no pudo exponer sus problemas al impedírselo los técnicos municipales. Sin embargo, al enviar a los padres la circular que explicaba el motivo del cierre, el Ayuntamiento les hizo llegar 'hasta tecnología punta'. 'Cuando se han puesto a trabajar con interés, no han tardado más de ocho horas en arreglar una caldera que llevaba dos meses sin funcionar', dicen.

El concejal de Educación, Ángel Luis Tendero, considera que todo ha sido 'una fatalidad'. 'A veces ocurren estas cosas, es una calefacción nueva que empezó a dar problemas cuando se cambió un depósito', explica. Admite que el sistema funcionaba mal, pero que los servicios técnicos y la empresa de mantenimiento siempre han estado encima. Su opinión es que ha existido cierta precipitación en la actuación del colegio.

Por otra parte, el edificio que alberga a los niños más pequeños, de tres años, tiene un patio rodeado de una valla que se mueve y presenta grietas. El alcalde de Majadahonda, Ricardo Romero de Tejada, del PP, manifestó en la reunión que mantuvo ayer con el colegio que no tenía constancia de este otro problema, pero aseguró que se arreglaría lo antes posible. El muro dañado permanece aislado con unas vallas metálicas.