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Tribuna:HOSPITALES DE ALTA RESOLUCIÓN
Tribuna
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Un nuevo impulso a la atención sanitaria en Andalucía

Hace sólo siete años, en 1993, un panel de expertos reunidos por Andersen Consulting para analizar el futuro de la Sanidad en Europa concluía que para el año 2000 la proporción de pacientes hospitalizados según el concepto tradicional no llegaría al 50%. El tiempo les ha dado buena parte de razón y, desde entonces, con la excepción de Bélgica, no han dejado de clausurarse camas hospitalarias en todos los países de Europa occidental, a un ritmo aproximado de un 2% anual. La necesidad de recortar el gasto sanitario por un lado, unido a la disponibilidad de alternativas eficaces a la hospitalización tradicional (cirugía mayor ambulatoria, CMA, hospitales de día, hospitalización domiciliaria, etcétera) y la aplicación de nuevas tecnologías diagnósticas y terapéuticas, han sido los factores determinantes del cambio ocurrido.

En Andalucía las cosas han sido diferentes. Entre 1984 y 2000, la Junta de Andalucía ha inaugurado 16 hospitales públicos de nueva planta y adquirido otros dos a sus correspondientes propietarios, configurándose así una de las redes de hospitales comarcales públicos más modernas y tupida de Europa, lo que ha permitido desconcentrar los recursos y dotar de ellos a aquellas áreas con mayores déficits históricos. Estos nuevos hospitales han supuesto un total de 5.468 nuevas camas hospitalarias y han hecho posible que, en estos momentos, 92 de cada 100 andaluces vivan a menos de 30 minutos de su hospital de referencia.

¿Hemos ido en Andalucía en contra de la historia? Más bien creo que hemos ido persiguiéndola, tratando de recuperar los tiempos perdidos. Por eso es ahora el momento de abordar este nuevo periodo, como están haciendo todos los sistemas sanitarios de nuestro entorno, caracterizado por un tipo de asistencia hospitalaria más inmediata, más resolutiva, menos burocrática, en la que el factor cama ya no es un valor, pues está siendo sustituido por el de la operatividad, es decir, por la capacidad para dar respuesta de calidad en un plazo mínimo.

Estos nuevos hospitales de alta resolución, ubicados tanto en el medio rural como en el urbano y conectados por un lado con hospitales de referencia más tradicionales y con la atención primaria por el otro, siguen teniendo camas, pero ésta no es ya su unidad de medida. Sus servicios combinan la calidad de sus cuidados con la cercanía de su ubicación y la inmediatez de su respuesta. En su funcionamiento, la pieza fundamental es la calidad del proceso asistencial desde el enfoque integral, la continuidad de la asistencia y las mejoras de la accesibilidad a sus servicios, conjugando calidad, cercanía y agilidad; haciendo posible el objetivo de que en un acto único se puedan resolver dos de cada tres procesos: tanto en lo que se refiere al diagnóstico como a su correcto tratamiento.

En este nuevo periodo debe seguirse avanzando por el terreno de la gestión de la confianza: hacer que el ciudadano enfermo confíe en el sistema. Para ello no basta con que nuestros dispositivos de urgencia resuelvan o alivien el síntoma; además, el paciente debe poder conocer, en el plazo más breve posible, el alcance real de su padecimiento, es decir, si su dolencia es grave, si su tratamiento puede esperar. De ahí la importancia de disponer de suficientes y adecuados medios diagnósticos en estos nuevos dispositivos sanitarios.

En Andalucía no partimos de cero. En el año recién pasado, nuestros profesionales habrán realizado casi 80.000 intervenciones quirúrgicas mediante cirugía mayor ambulatoria, una actividad que va a suponer el ahorro de unas 250.000 estancias hospitalarias, para las que hubiésemos necesitado de 700 camas hospitalarias tradicionales. Nuestro sistema de salud parece pues estar preparado para afrontar este nuevo reto, conscientes como somos de que la legitimidad de éste, como de cualquier otro servicio público, está en proporción directa con su capacidad para adaptarse a las nuevas necesidades de los ciudadanos. Es decir, para proporcionar respuestas adecuadas a sus expectativas, en tiempo y en forma.

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Antonio Núñez Roldán es portavoz de Salud del Grupo Socialista en el Parlamento de Andalucía.

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