El mal pastor
La primera noción del ganadero consiste en no confundir vacas, ovejas, caballos, conejos, gallinas, cerdos, palomas y demás. La fisiología empieza por fuera, es fijarse en el bicho -identificación zootécnica- antes de darle crianza, venta y matanza, o de tocarle el caramillo con las quejas de Salicio y Nemoroso juntamente. No se le pida al ganadero que haya leído la biblia sexual de Sodoma y Gomorra ni que aprendiera en escolapios el estómago rumiante cuatripartito -panza, libro, redecilla y cuajar-, pero nuestras autoridades democráticas debieron impedir que los establos se convirtieran en casinos de engorde loco.Les dicen locas a las vacas de beneficios locos. Guarrería protoeuropea, vieja en media España, cruzar de carnívoro al vegetariano, transformar los recentales en prometedoras hienas. ¿Por qué pensamos, siempre al revés: que batas blancas, análisis y democracia, exorcizarían el afán de beneficio carroñero?- Iñaki Desormais. Pamplona
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.