"Un pacto contra ETA y no contra el PNV"
Jesús Caldera, salmantino de 43 años, es portavoz del Grupo Parlamentario del PSOE y preside la comisión negociadora con el Gobierno en materia antiterrorista. Caldera alaba el "magnífico trabajo" que ha hecho el diputado Alfredo Pérez Rubalcaba, "auténtico artífice del pacto".Pregunta. ¿Para qué sirve este pacto?
Respuesta. Sirve, sobre todo, para defender las libertades en el País Vasco y combatir a ETA. El pacto fija, por vez primera y de modo definitivo, que la lucha antiterrorista es una cuestión de Estado. Y, como tal, la respuesta de los demócratas frente a ETA, gobierne quien gobierne, siempre será la misma.
¿Cómo combate a ETA este pacto?
Uniendo los esfuerzos del Gobierno y la oposición. Vamos a compartir estrategias y objetivos contra ETA.
¿En qué se concreta esta colaboración?
A partir de este pacto, Gobierno y oposición compartiremos iniciativas en política penitenciaria, en las reformas legislativas, en la movilización ciudadana y en un terreno al que ETA es especialmente sensible: el internacional.
¿No existía antes cooperación entre Gobierno y oposición frente a ETA?
Antes existían consultas del Gobierno a la oposición y el Ejecutivo adoptaba, a veces, medidas unilaterales. Con el pacto pasamos de la etapa de la consulta a la corresponsabilidad y, además, nos comprometemos por escrito a no utilizar la política antiterrorista como elemento de confrontación entre el Gobierno y la oposición.
El gran caballo de batalla de estos meses entre el Gobierno y ustedes ha sido que el Ejecutivo les ha acusado de disociar la lucha contra ETA de la situación vasca. El pacto reconoce que están vinculadas.
Es verdad que no se puede disociar la situación vasca de la lucha contra el terrorismo. No es lo mismo quién gobierna en el País Vasco. Pero también hay que distinguir que el enemigo es ETA y no el nacionalismo democrático. A éste hay que dejarle abierta una puerta al diálogo. Creo que con el pacto lo hemos logrado y hemos moderado las posiciones del PP. Y también aporta algo que me parece fundamental, que es el compromiso de impulso cívico en la defensa de las instituciones democráticas en Euskadi. A ese espacio de libertades tenemos que atraer al PNV.
¿No teme que este acuerdo PP-PSOE retraiga aún más al PNV?
No sería deseable. Insisto en que es un pacto contra ETA y no contra el nacionalismo. Nadie le pide al PNV que reniegue de su esencia. Sólo se le pide que rompa con el Pacto de Estella porque comparte fines con quienes apoyan a los violentos. El pacto reconoce que el Estatuto dispone de los mecanismos para reformarlo. Lo único que no se acepta como demócratas es el aprovechamiento de la violencia para cambiar la situación.
¿No cree que este pacto abre una dinámica favorable para un pacto entre el PP y PSE tras las elecciones vascas?
El pacto establece claramente los límites de los compromisos entre el PP y PSOE: se refieren a la lucha antiterrorista y a la defensa de las libertades en el País Vasco. Para determinar las alianzas electorales, antes hay que conocer lo que votan los vascos.
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