Mamá Junta

La Junta, tras construir con éxito la Autovía del 92, se apresta con gran entusiasmo a la educación sexual. La caravana del amor recorre provincias e institutos como si de un circo se tratara. La Junta considera ineptos a los padres andaluces y explica su concepción sobre la sexualidad a los jóvenes que permanecen aún bajo la tutela familiar. Ningunea asimismo al profesorado y contrata los servicios de entidades privadas de lo sexual para que extiendan su magisterio entre la juventud.El Estado, aconfesional y laico, impone su modelo ético. Pues no se trata de una prevención contra la gripe o la caries, sino de campañas dirigidas a educar a los jóvenes en el uso de la libertad. La Junta se ha autoproclamado mamá de todos los chicos y chicas andaluces, y les enseña lo que es bueno o lo que es malo.

La Administración andaluza está muy preocupada por los embarazos no deseados de los jóvenes y quiere repartir píldoras abortivas, como si de caramelos se tratara. Parece ser que Andalucía será la primera comunidad que suministre esta píldora, según ha anunciado el consejero de Salud de la Junta.

¿De salud? ¿De la salud de los embriones que quiere neutralizar? La Junta, con esta medida, engrosa su ya abultado currículo de éxitos en materia educativa, sanitaria, viaria, etcétera.

Con gran impunidad, autoridades de la Junta aconsejan el aborto como una de las medidas posibles ante los embarazos no deseados. Estos alardes de legalidad pueden leerse en la prensa. Resulta que en la legislación española el aborto está despenalizado en tres supuestos, y ninguno de ellos comprende el fallo del preservativo.

Pues claro que es un problema ético un embarazo no deseado. ¿Qué sistema ético promueve la Junta para solucionarlo? ¿Platónico, aristotélico, epicúreo, estoico, maquiavélico, freudiano, consecuencionalista? ¿Han pactado con padres y jóvenes la ideología que están inoculando?

Conviene abrir un amplio e intenso debate sobre estas cuestiones. La credibilidad de la Junta en materia educativa está por demostrar. Y los agentes de la Junta campan por Andalucía como nuevos vándalos.-