Prioridad cero para la nueva financiación

El Gobierno quiere pactar el equilibrio fiscal con las autonomías antes de revisar su modelo de ingresos

Nadie demuestra prisa para empezar a negociar un nuevo sistema de financiación autonómica. Ni siquiera CiU, que está enfrascada en sacar adelante el presupuesto de la Generalitat con ayuda del PP.La financiación actual, que el Gobierno del PP pactó contra el reloj en 1996 con CiU para lograr investir presidente a Aznar vence al final del año próximo. Pero el Gobierno central ha adelantado que primero quiere sacar adelante una ley que exija el déficit cero no sólo a la Administración central, sino a todas las comunidades autónomas. Para hoy está previsto que el Gobierno exponga este plan en el Consejo de Política Fiscal y Financiera.

El Gobierno catalán planteó antes de que el PP lograra mayoría absoluta en las elecciones una propuesta que pasaba por recaudar el 60% del IRPF, el 50% del IVA y el 100% del resto de los impuestos. No hay otra propuesta explicitada, pero dirigentes de CiU reconocen que este planteamiento ha perdido fuerza tras el triunfo electoral del PP. CiU quiere también la transferencia de la gestión de la Agencia Tributaria.

El PP no ha enseñado aún sus cartas. Lo único explicitado por el partido y hasta ahora no cuestionado es la llamada propuesta Zaplana, lanzada por el presidente valenciano, Eduardo Zaplana, que consiste en recaudar al menos el 30% del IRPF, el 100% de los impuestos especiales y el 100% del IVA, en este último caso sólo de los servicios relacionados con empresas energéticas y de abastecimiento de agua.

Los socialistas ultiman sus propuestas. El PSOE aprobó por unanimidad en el verano de 1998 un documento sobre la estructura del Estado que define varios parámetros para avanzar en un nuevo sistema de financiación autonómica "sobre la base de la corresponsabilización fiscal de las comunidades y la diversificación como un instrumento tributario", afirma Juan Fernando López Aguilar, secretario de Desarrollo Autonómico.

Los socialistas catalanes plantean la cesión a las autonomías de una cesta de impuestos integrada, además del IRPF y el IVA, por los impuestos especiales, pero no el de sociedades, según el catedrático de Hacienda Pública Antoni Castells.

En la misma línea, López Aguilar señala: "No nos limitemos a negociar sobre el IRPF. El PSOE propone negociar sobre el IVA minorista y la cesión de impuestos especiales, dejando abierta a la negociación la cuestión de la capacidad normativa [capacidad de subir o bajar los impuestos]", afirma el diputado socialista. "La capacidad normativa", añade López Aguilar, "no puede leerse como una carta blanca para poner tarifas sometidas a armonización con Europa, sino como un mecanismo para mejorar la gestión tributaria y la lucha contra el fraude. Eso sí lo pretendemos negociar". Pero el dirigente socialista advierte: "No apostaremos por fórmulas que supongan que diferentes impuestos, como el de la gasolina, sean distintos en Castilla y León y en Castilla-La Mancha".

El grupo parlamentario socialista propone integrar en los acuerdos sobre la financiación de las autonomías la deuda de la sanidad (350.000 millones en Cataluña), señalaron ayer Martí Carnicer y Joaquim Nadal.

Los diputados socialistas dijeron que "urge un nuevo modelo de financiación autonómica", pero insistieron en que no puede hacese sobre la base de cálculo de las cifras de 2001. La razón es que entienden que "está viciado" porque Cataluña y el resto de las autonomías han perdido peso con relación a los recursos de la Administración central.

Según Nadal, "el pacto del hotel Majestic entre CiU y el PP trajo un incremento de ingresos para el Gobierno central". Las autonomías tienen que "recuperar el tiempo perdido".