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AULAS

Profesores del instituto Pérez de Guzmán de Ronda denuncian un rechazo social al centro

La Junta obligará a los alumnos a matricularse donde les marca el sistema de adscripción

El jefe de Estudios del instituto Pérez de Guzmán, Pedro Cabrera, asegura que padecen un rechazo social por parte de la ciudad. Advierte del peligro de que el centro se convierta en un "gueto" si continúa el descenso en la matriculación. Según Cabrera, al haber plazas en los demás institutos, los padres renuncian a inscribir a sus hijos en el Pérez de Guzmán, al que asisten escolares de La Dehesa, una zona desfavorecida de Ronda. La Junta de Andalucía limitará la oferta de plazas de los otros centros para garantizar la matriculación en el instituto que a cada alumno le corresponda.

Profesores del Pérez de Guzmán, que tiene adscritos dos colegios de una zona desfavorecida de Ronda, La Dehesa, han denunciado que la huida de estudiantes que están experimentando responde al rechazo social. Matizan que los padres renuncian a matricular a sus hijos donde se están acumulando alumnos con dificultades sociales y que pueden resultar problemáticos. El jefe de estudios, Pedro Cabrera, aseguró que su intención no es que estos adolescentes sean trasladados a otros institutos, sino que se haga un reparto equitativo para acometer mejor su tratamiento, ya que se corre el peligro de convertir el centro en un "gueto".Cabrera solicita a la Junta que uno de los colegios de La Dehesa sea adscrito o al instituto Martín Rivero o al Rodríguez Delgado. Estos centros, junto al Pérez de Guzmán, están ubicados en un radio de unos 200 metros, lo que "no plantearía problemas de desplazamiento", al estar cercanos al barrio.

El delegado de Educación en Málaga, Juan Alcaraz, hizo otro análisis de los hechos. Puntualizó que, ante este grupo de alumnos con una situación social y económica "desfavorable", los docentes del Pérez de Guzmán han manifestado un "rechazo a hacerse cargo de esa realidad" y a volcarse en su tratamiento. En lugar de hacer un reparto equilibrado, el delegado redundó en la necesidad de que estos estudiantes estén concentrados en un mismo lugar.

La única medida que tomará Alcaraz es limitar las plazas excedentes en los otros institutos de Ronda para que los alumnos accedan al centro que les corresponde según el sistema de adscripción. La decisión, que se aplicará en el curso 2001-2002, tras un importante descenso de matriculaciones registradas en al IES Pérez de Guzmán, que en el curso 2000-2001 ha recibido la mitad de los escolares procedentes de los dos colegios que tiene asignados.

La merma de alumnado ha sido provocada por la renuncia de matriculación al Pérez de Guzmán en favor de los otros dos institutos cercanos y por un "error de cálculo", según reconoció el delegado. Al planificar el presente curso, estaba previsto que el centro absorbería los alumnos salientes de los cinco centros privados concertados de Ronda, hecho que no se constató.

El responsable de Educación en Málaga, que admitió este trasvase de estudiantes y los bajos índices de inscripción, descartó una adscripción libre como solución. La única salida es "limitar la oferta en los restantes institutos" para obligar a los alumnos a inscribirse sólo en los institutos que les corresponda. La medida está encaminada a que el Pérez de Guzmán pueda acoger a buena parte de los estudiantes de los colegios privados concertados de la ciudad.

Asimismo, si el instituto General Alamán, dependiente del Gobierno central, es cedido a la Junta de Andalucía en el próximo curso, la Junta cambiará el sistema de adscripción. No obstante, Alcaraz negó categóricamente que los dos colegios del barrio de La Dehesa sean separados en el nuevo reparto.

El instituto Pérez de Guzmán cuenta con 528 alumnos, mientras que hace cuatro años alcanzaba los 1.000 matriculados. El jefe de estudios precisó que el rechazo al que alude se consolidó en el curso 1999-2000 cuando no recibieron ni una sola prescripción de alumnos de la comarca de Ronda. Hasta ese momento se inscribían entre 150 y 200 estudiantes de las zonas rurales. El cambio en la adscripción otorgó al IES Martín Rivero la recepción de los escolares de la comarca.

El panorama es bien distinto en el Martín Rivero, con 1.300 estudiantes, y el Rodríguez Delgado, al que acuden 715 alumnos que copan todas sus plazas. Desde este último instituto se admite que muchos alumnos que dejan de ir al Pérez de Guzmán para matricularse en el Rodríguez Delgado, lo hacen por el ambiente que se está generando en el centro.

La falta de horarios ha propiciado que en el actual curso dos profesores, de Inglés y Educación Física, hayan sido trasladados.

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