"La carne de vacuno es el alimento más seguro de todo el mercado"

Asier Albizu es el director de Política e Industria Agroalimentaria del Gobierno vasco. Su consejo de seguir comiendo carne de vacuno está respaldado por los controles de su área, que han situado a Euskadi por delante de la media europea de prevención agroalimentaria. Pregunta. Acaba de descubrirse en Galicia el primer caso de vacas locas de España. ¿Qué posibilidades hay de que ese foco llegue a Euskadi?

Respuesta. Lo primero que hay que explicar es que la Península Ibérica ha estado infectada desde hace tiempo, porque ya se han encontrado casos en Portugal, por importación de terneros o madres de Inglaterra, Irlanda y norte de Francia, ya que la relación entre los puertos de esta zona y los lusos es muy intensa. Y de ahí a Galicia, donde los controles fronterizos son mínimos, por lo que estaba claro que no iba a tardar en llegar el contagio. Eso sí, vamos a seguir manteniendo el control estricto no sólo preventivo, sino también de análisis de los animales sanos. Y, como hemos mostrado con el caso de las ovejas de Oñati, seguiremos con una política de transparencia total.

P. Pero no hay laboratorios en Euskadi para analizar estas enfermedades.

R. Hay dos tipos de laboratorios; unos son los que detectan la existencia de harinas de carne en los piensos, que nosotros realizamos en la Fundación Asti, que se encuentra en Sukarrieta; y la otra es la analítica de la proteína que lleva la enfermedad, para la que no tenemos laboratorios homologados. Pero, desde hace 15 días estamos trabajando para crear la infraestructura para realizar en los mataderos análisis inmediatos de cada res muerta.

P. ¿Cuándo se pondrá en marcha esta iniciativa?

R. Aún no tenemos el informe de los veterinarios, para que nos señalen las claves científicas y, sobre todo, la edad mínima a partir de la que la res se tiene que analizar. De momento, tenemos calculado que la inversión en los kits de análisis será de 250 millones al año. Luego están los recursos humanos y la infraestructura. Eso sí, no vamos a ser los últimos en llevarlo a cabo. Queremos ser punteros, como hasta ahora.

P. Pero también hay una carencia de instalaciones para incinerar los restos de los animales.

R. Lo que ha ocurrido es que hasta el 1 de octubre sí llegábamos con nuestras incineradoras para quemar los llamados MER (materiales de especial riesgo), pero ese volumen se ha multiplicado por tres o cuatro, ya que ahora son todos los animales de 12 meses, y no sólo los procedentes de Irlanda, Francia o Inglaterra. Hemos tenido que buscar un acuerdo con una planta de León, pero en tres meses esperamos contar con instalaciones propias.

P. El 55% de la carne de vacuno que se consume en Euskadi está criada en el País Vasco, ¿Cómo se controla el resto?

R. La mayor parte procede del resto de España que se sacrifica en mataderos de fuera, que son más baratos, pero también menos estrictos. De todos modos, Sanidad cuenta con una plantilla de inspectores que supervisa esta carne en los almacenes frigoríficos repartidos por el País Vasco. Eso sí, tiene menos controles, por nuestra parte, que la de los animales criados aquí.

P. ¿Hay carne de los países más afectados, como Inglaterra o Francia?

R. No, a no ser en alguna gran superficie que forme parte de alguna cadena de esos países. La que viene del extranjero [15% del total], procede del norte de Alemania y Dinamarca.

P. La causa más señalada del mal de las vacas locas es el pienso con harinas de carne. En Euskadi está prohibido desde 1994 para el ganado vacuno. ¿Y para los otros ganados?

R. No estamos en contra de prohibir ese tipo de piensos para las aves, los cerdos y los peces, ya que no está demostrado que sea incompatible, tal y como lo es para los rumiantes. Creo que en Francia, por ejemplo, este debate ha sido más publicitario. En el País Vasco, hay dos plantas ejemplares.

P. ¿La propagación de esta enfemedad es un aviso para el cambio de la dieta europea?

R. No creo que haya que cambiar nuestra cultura gastronómica. Al contrario; la carne que estamos comiendo está tan controlada que probablemente será el alimento más seguro de todo el mercado, y más cuando se controlen todos y cada uno de los animales.

P. ¿Y no hay peligro de que el hígado o la lengua puedan estar infectadas? ¿Cómo puede estar tranquilo el consumidor?

R. La UE permite la venta de esta parte del animal. Además, el consumidor puede comer tranquilo todo aquello que está expuesto en la carnicería. Eso sí, yo me abstendría de comprar nada que viniera de animales que son para autoabastecimiento. De todos modos, Sanidad va a sacar un decreto para regular estos sacrificios particulares, típico de los caseríos de nuestro país.