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Reportaje:RETRATO ECONÓMICO

Con los precios por las nubes

Unas 4.500 personas ofrecen servicios inmobiliarios, un sector que ha vivido en los últimos años una época dorada.

Un variopinto conjunto de empresas integran el sector de servicios inmobiliarios, que ayer terminó su cita anual en el Salón Inmobiliario organizado por el grupo Planner en la Feria de muestras de Bilbao, que ha tenido una asistencia de 15.000 personas. Es ésta una actividad que emplea a 4.500 personas en Euskadi, entre promotores de vivienda, agencias inmobiliarias y sociedades de tasación, y que se ha salido de la tabla en los últimos años por el incremento espectacular del coste de la vivienda.En 1996 y en 1997 el precio por metro cuadrado de vivienda se mantuvo en las 237.000 pesetas, comenzando un año después una escalada que ha aumentado el precio medio por metro cuadrado hasta las 369.000 pesetas alcanzado en el tercer trimestre de este año, según el Eustat.

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Pero éste es la cifra media en un baremo que va desde las 121.000 pesetas que cuesta el metro cuadrado de una vivienda social o de protección oficial hasta las 393.000 pesetas que vale en el mercado la misma porción de una vivienda usada. Sólo en el último año el coste de las viviendas de segunda mano, que son la gran mayoría, ha crecido el 31%.

La evolución de los precios refleja también las diferencias económicas de la sociedad vasca. Así, mientras 1.700 personas esperan poder optar a una de las 300 viviendas de lujo que se construirán en Uribitarte, en Bilbao, varios miles de jóvenes engrosan las listas para acceder a las viviendas de promoción pública. Y es que, según un estudio del Gobierno vasco, más del 60% de los jóvenes no pueden comprar un piso de más de 10 millones.

En la otra cara de la moneda, un ejemplo reciente ilustra el gran poder adquisitivo que disfrutan algunos. Cuando se rehabilitó el lujoso edificio de Lezama-Leguizamón, en la Gran vía bilbaína, hubo tantas solicitudes de compra, que los promotores eligieron a los compradores. "Casi se exigía pedigrí", dice José Ramón Gorostiza, presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad inmobiliaria de Vizcaya, quien asegura que los precios "han tocado techo".

La pujanza económica y los mínimos históricos de los tipos de interés han animado espectacularmente la compra de viviendas. Sin embargo, las advertencias del Banco de España para frenar la concesión de los créditos hipotecarios se han cumplido y con el aumento del precio del dinero parece que el negocio inmobiliario va a decaer.

No es éste, sin embargo, un problema que preocupe al sector. "El año que viene el mercado va a estar mucho más flojo pero éste es un sector que se autorregula. Cuando hay menos ventas, hay mucha gente q ue desaparece", asegura Gorostiza. Y es que, según datos del Eustat, hay cerca de 3.000 establecimientos que ofrecen servicios inmobiliarios, pero apenas el 25% de ellas pueden considerarse empresas, con empleo y cierta continuidad.

Sí preocupa al sector, en cambio, la decisión del Gobierno central de liberalizar los servicios de mediación en la compraventa de viviendas a través del Real Decreto 4/2.000 del Ministerio de Economía. Esta norma, del pasado 23 de junio, permite a cualquier persona, sin ningún requisito ni título, intermediar en la compra o venta de un inmueble. Esta decisión ha caído como un jarro de agua fría entre los profesionales del sector y, sobre todo, entre las más de 4.000 personas que el pasado abril recibieron el título de API del Ministerio de Fomento, después de formarse y pasar el examen correspondiente para poder ejercer.

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