CC OO y CGT denuncian falta de seguridad en las minas del Bages

El último accidente mortal en las minas de potasa del Bages ha reabierto el debate sobre su seguridad, puesta en entredicho por la presencia de empresas subcontratadas que trabajan en el interior de las minas, según denuncian los sindicatos CC OO y CGT. El pasado viernes, Alfonso López, de 21 años, murió al perder el control de la pala excavadora que conducía, que se deslizó por una pendiente de 200 metros en una mina de Súria. La titular de la mina es Iber Potash, del grupo israelí Dead Sea Works, pero el joven fallecido trabajaba en la mina contratado por la empresa Montajes Rus de Berga.

Comisiones Obreras y CGT consideran que los empleados de las empresas subcontratadas corren el mismo riesgo que los mineros de plantilla, pero trabajan en condiciones más precarias porque no están sometidos a los convenios colectivos y al estatuto minero, que ordena las condiciones de trabajo. La Federación Minerometalúrgica de Catalunya de Comisiones ha denunciado que la máquina que causó el accidente de Alfonso López es un modelo "obsoleto", con una antigüedad de más de 20 años y sin los sistemas de seguridad que incorporan las máquinas actuales. El sindicato agrega que "hoy en el mercado existen palas cargadoras que impiden que se puedan producir accidentes de este tipo, ya que llevan mecanismos que bloquean la máquina" y pide la retirada de inmediato del modelo que causó la muerte del joven. Comisiones añade: "El accidente también ha puesto en evidencia la falta de adecuación de la galería de evacuación de la mina, que está impracticable".

De hecho, la máquina que ocasionó el accidente fue retirada por la empresa Iber Potash, que traspasó su uso a la subcontratada Montajes Rus, una práctica habitual en las minas de Sallent y Súria, ambas propiedad del grupo israelí.

Reclamaciones

Antonio Garrido, de CGT y presidente del comité de empresa de Potasas del Llobregat, explica que Montajes Rus tiene en funcionamiento en esta mina un minador (máquina extractora que abre la galería), al que también califica de "obsoleto" porque había sido descartado por la empresa titular y porque los modelos actuales ofrecen más prestaciones y seguridad para el minero.Los sindicatos presentes en las minas de Súria y Sallent han presentado en los últimos años reclamaciones ante la Inspección de Trabajo porque algunos empleados de las empresas subcontratadas realizan jornadas muy superiores en tiempo a las pactadas en los convenios de las minas, lo cual supone, a juicio de los sindicatos, un incremento del riesgo de accidente laboral. En la actualidad, esta inspección ha iniciado una investigación de la situación laboral en Sallent.

Los sindicalistas tienen otras causas pendientes, como el hecho de que las empresas subcontratadas realicen trabajos que son propios de las plantillas, como la misma extracción de mineral, y que no respeten el estatuto minero. La plantilla en las minas de Sallent y Súria es de unos 1.000 trabajadores, a los que se debe añadir el 25% más de personal procedente de empresas subcontratadas, que trabaja con carácter fijo en las minas.