García Antón defiende la eficacia en el ahorro de agua que cuestionan los críticos con el trasvase del Ebro
El titular de la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes (COPUT), José Ramón García Antón, salió ayer al paso de las críticas esgrimidas por los ecologistas y los partidos políticos que se oponen al Plan Hidrológico Nacional (PHN) y al trasvase del Ebro que éste prevé. Y lo hizo defendiendo la eficacia en el ahorro del agua promovida desde el Consell tanto en el abastecimiento urbano como en el agrícola. Pese a los logros que espera conseguir, García Antón aseguró que siguen haciendo falta aportes externos de agua.En primer lugar, el consejero de Obras Públicas rebajó sustancialmente el cálculo de pérdidas en los abastecimientos urbanos apuntado por los ecologistas (el 50%). Así, estimó que en la Comunidad Valenciana sólo se pierden entre el 15% y el 20% de los recursos que pasan por los contadores de agua en alta. E incluso matizó la definición de pérdidas: "Como pérdida no sólo se contabiliza lo que se pierde por una rotura o una filtración". Así, explicó que bajo ese concepto también se incluye el agua que no se contabiliza en los contadores de consumo en baja (doméstico) pero a la que sí se le da otros destinos, como el riego, el baldeo de calles y otros usuarios que carecen de aparatos de medida.
Bajo este prisma, García Antón dibujo ayer un panorama mucho más benigno. A su juicio, en las grandes capitales, empresas de suministro como Aguas Municipalizadas (Alicante), Aguas de Valencia o FACSA (Castellón) son "ejemplos de gestión profesionalizada" que invierten en I+D y que salvo problemas puntuales optimizan la distribución al máximo. Y aunque el consejero valoró cualquier acción que disminuya las pérdidas, explicó que el abastecimiento urbano sólo supone entre el 15% y el 20% del consumo de agua por lo que optimizar esta distribución en, por ejemplo, un 5%, "que sería muchísimo", sólo supondría un 1% de los recursos totales de la Comunidad.
Por este motivo incidió en modernizar el consumo agrícola, sector que consume el 80% del total de recursos y que por tanto repercutiría mucho más que cualquier mejora: "Un ahorro del 10% supondría el 8% de los recursos totales en la Comunidad".
Deberes casi hechos
En este sector, García Antón tampoco estuvo de acuerdo con las críticas de los ecologistas. Ante la afirmación de que la Comunidad no estaba haciendo los deberes, el consejero replicó: "Los deberes fundamentales: unos están haciéndose y otros están hechos, y en tiempo récord". Pero aseveró: "Aún haciendo todos los deberes no vamos a tener agua suficiente con nuestros propios recursos y necesitaremos un aporte externo".Recordó García Antón que los socialistas plantearon un trasvase del Ebro de 1.900 hectómetros (900 para la cuenca del Júcar) y que el PP los ha reducido, en un ejemplo de "sensatez y prudencia", a sólo 1.000 (de los 300 para el Júcar, 80 para Castilla-La Mancha, 60 para Castellón y 160 para el Vinalopó).
Por último, aunque en el proyecto del trasvase Júcar-Vinalopó se descartó enviar agua desde Tous porque el uso de este embalse para acumular agua dificultaría su principal misión, evitar inundaciones, el consejero aseguró: "Tous no perderá su capacidad para laminar avenidas ni en un metro cúbico".
Sin embargo, aunque defendió el trasvase Tajo-Segura -"¿qué sería de Alicante y Murcia si no existiera?, estaríamos muertos", "su éxito ha sido impresionante aunque no haya sido perfecto"- reconoce que su construcción, en vez de solucionar definitivamente el problema, aumentó la demanda. Pero aseguró que una correcta planificación impedirá que el agua del Ebro multiplique las expectativas.
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