David Trueba estrena 'Obra maestra' cuatro años después de su primer filme

Cuatro años después del estreno de su primer filme, La buena vida, David Trueba ha rodado el segundo, Obra maestra. La película, que se estrenará el próximo viernes, está interpretada por Ariadna Gil, Santiago Segura y Pablo Carbonell. Pero si de mezclas se trata, en la cinta hay varias muestras, como el tono en el que está narrada -se alternan la tragedia y el drama- y el complejo carácter de los personajes.

El tiempo transcurrido entre el rodaje de su ópera prima y este nuevo filme le ha servido a Trueba para tomar distancia y definir hacia dónde quería ir. "Más que desmarcarme, no quería estar esclavizado por mi anterior película", afirma el cineasta. Y define esta esclavitud como el deseo de no decepcionar a quienes disfrutaron de aquel primer trabajo. "Me gustaría volver a gustarles, pero ése no debe ser el motor por el que haces las cosas. No puedes ir detrás de la gente". A diferencia de lo que pensaba en su debut, Trueba tenía muy claro que esta vez quería contar con actores muy conocidos. Ariadna Gil y Santiago Segura eran dos nombres que tenía en mente desde el principio. En cambio, albergaba serias dudas "acerca de la capacidad de concentración de Pablo". Había una razón muy especial para que Trueba quisiera contar con el ex cantante de Los Toreros Muertos, hoy lúcido reportero en Caiga quien caiga. "Le dije a Pablo que le quería en el reparto porque con él no sabía cómo sería la película, mientras que con otro actor me la podía imaginar".

En Obra maestra, Gil da vida a una afamada actriz que no atraviesa por su mejor momento. Segura y Carbonell interpretan a dos cinéfilos empedernidos, director virgen y aspirante a actor respectivamente, que deciden secuestrar a la actriz para convertirla en protagonista de su primera película.

La cuestión es que el argumento coincide con el del último filme de John Waters, Cecil B. DeMented, interpretado por Melanie Griffith y Stephen Dorff. En esta película, presentada este año en los festivales de Cannes y San Sebastián, la mujer de Antonio Banderas interpreta a una actriz secuestrada por un director que la quiere como protagonista de su nueva película. Trueba considera que los paralelismos acaban aquí. Sin embargo, los representantes de Waters opinan que las coincidencias son demasiadas, y han intentado impedir el estreno de Obra maestra amenazando con emprender acciones legales. "No me preocupa, creo que son muy diferentes", insiste Trueba.