Un padre mata a su yerno en un pueblo de Córdoba al intentar proteger a su hija maltratada

Manuel Rosa Jiménez, de 67 años y vecino de Aguilar de la Frontera (Córdoba), ha sido detenido como presunto autor de la muerte del compañero sentimental de su hija, a la que maltrataba continuamente, según la versión de la familia del presunto homicida. Los hechos ocurrieron la tarde del martes en esa localidad cordobesa, a la que se trasladó José Toro Ruiz desde su residencia en Moriles (Córdoba) en busca de su compañera sentimental y de la hija de ambos, que nació el pasado 12 de octubre. La joven se había refugiado en casa de sus padres en Aguilar de la Frontera (13.000 habitantes) tras haber sido amenazada de muerte por su compañero, con el que convivía desde hacía cuatro años en Moriles. Según las distintas versiones recogidas, los malos tratos se acentuaron después del nacimiento de su hija, ya que el fallecido había insistido en ocasiones en que no era suya.

Esta creencia le había llevado a amenazar de muerte a su compañera y al bebé, circunstancia ésta que obligó a la joven a refugiarse en la casa de sus padres. Con anterioridad eran frecuentes las discusiones entre la pareja en su domicilio de Moriles. José Toro fue detenido en su pueblo en varias ocasiones tras haber sido denunciado por malos tratos domésticos.

José Toro llegó sobre las 16.30 al antiguo domicilio familiar de su compañera sentimental, donde el presunto homicida tenía un taller de reparación de calzado. Las relaciones entre el suegro y el yerno no eran buenas debido a esos malos tratos.

Toro irrumpió en la zapatería asegurando que el bebé no era suyo y se originó una discusión entre ambos. En el transcurso de la misma, Toro sacó una navaja de unos ocho centímetros de hoja y la clavó en el glúteo de su suegro. No está confirmado si después Manuel Rosa arrebató el arma con la que fue agredido o utilizó otra para asestar un navajazo en el pecho de su yerno que le seccionó la arteria aorta, provocándole la muerte casi instantánea.

El herido fue detenido sin ofrecer resistencia alguna por la Guardia Civil y fue trasladado al hospital Infanta Margarita, en Cabra (Córdoba), para curarse las heridas producidas por el navajazo.

José Toro estaba de baja en su trabajo por su adicción al alcohol, según han reconocido amigos de su círculo y sus propios familiares, que siempre han temido un desenlace como el ocurrido, ya que entre la pareja eran frecuentes las disputas, según denunciaron en varias ocasiones vecinos del entorno.

Tras ser detenido Manuel Rosa dijo que "sólo había pasado lo que tenía que pasar". Rosa está considerado en su pueblo como una persona tranquila, pacífica y trabajadora que nunca se mete en problemas.