La gestora holandesa de la funeraria envió 189 millones a cuentas francesas del ex asesor municipal

Itcon, una firma holandesa que fue subcontratada en febrero de 1993 para llevar la gestión de la funeraria de Madrid, envió 189 millones ese mismo año a las cuentas en Biarritz (Francia) de Inver Services, sociedad de José Ignacio Rodrigo, asesor en la venta del 49% de la funeraria municipal y hoy presidente de la empresa adjudicataria, Funespaña. También en febrero de 1993, Rodrigo ingresó 140 millones en Funespaña, en una operación calificada de "blanqueo de fondos" por parte de la policía francesa. Rodrigo nunca explicó ante el juez que había recibido 189 millones de pesetas de Itcon.

Funespaña no sólo consiguió el 49% del monopolio municipal de los servicios funerarios a cambio de 200 millones (ha ganado más de 5.000 millones desde entonces), sino que también logró una concesión especial: el Ayuntamiento de Madrid le entregó la gestión de la empresa a cambio del 20% de los beneficios antes de impuestos. El interventor municipal censuró esa circunstancia, que permitiría al socio privado y minoritario conseguir el 65% de los beneficios de la empresa funeraria con sólo el 49% de sus acciones.

El Gobierno municipal del PP nunca precisó en el pliego de condiciones que la gestión pasaría de las manos públicas al socio privado. Funespaña, en su oferta para comprar el 49%, incluyó esta condición, que el Ayuntamiento aceptó sin rechistar.

Funespaña no eligió a una empresa española para gestionar la funeraria de Madrid, sino que se fijó en una sociedad holandesa, Itcon, que previamente le había aconsejado José Ignacio Rodrigo, el ex asesor municipal de la funeraria. En las mismas fechas en que Funespaña encargó a Itcon la gestión de la funeraria, Rodrigo trasladó 140 millones de su cuenta en Biarritz a las arcas de Funespaña (para comprar acciones, según él; para hacer frente al pago de los 200 millones de la adjudicación, según el fiscal).

Itcon, con domicilio en Strawinskylan 1.725 (Amsterdam), "pertenece al Grupo Citco, relacionado con Inver Services y, por tanto, con José Ignacio Rodrigo", señalaba el fiscal. Hasta ahora sólo sus sospechas la relacionaban con Rodrigo. Pero la investigación de la policía francesa en las cuentas de las empresas de Rodrigo en Biarritz a petición del juez que instruye el caso de la funeraria, José Luis Quesada, ha evidenciado una relación con el hoy presidente de Funespaña: Itcon ha enviado cantidades millonarias a las cuentas de Inver Services en Biarritz, propiedad de Rodrigo.

La primera remesa de dinero que envió Itcon, empresa privada que supuestamente gestionaba la funeraria, a Inver Services, empresa de Rodrigo, data del 26 de abril de 1993 (dos meses después de que comenzase su trabajo en Madrid). Ese día Rodrigo recibió 84,5 millones de la empresa que había recomendado para lograr la "expansión" en Europa de Funespaña. En esa misma cuenta de Inver Services, Itcon abonaba 34,7 millones el 29 de octubre de 1993. El 31 de diciembre de 1993, Itcon ingresaba otras dos sumas (por valor de 28,9 y 41 millones) en cuentas de Inver Services en Biarritz. En total, la gestora de la funeraria había trasladado a cuentas de Rodrigo 189 millones de pesetas en ocho meses. Dinero que procedía de una empresa cuyos ingresos estaban condicionados a los beneficios que obtuviera la funeraria.

Si se confirma que las transferencias de dinero de Itcon a la empresa de Rodrigo procedían de la gestión de la funeraria, significaría que una empresa que Funespaña compró a precio de saldo por estar supuestamente en quiebra contabilizó y entregó beneficios desde cuatro meses después de su compra.

Sin contraprestación

El fiscal no dudaba de que Itcon había sido perceptora de los beneficios de la funeraria desde el primer año de su privatización. Itcon cobró de Funespaña, según el fiscal, 248 millones entre 1993 y 1994. De esos beneficios, al menos los 85 millones que abonó Funespaña a esta empresa holandesa el 21 de abril de 1993, coinciden con la suma transferida en esas fechas por Itcon a Inver Services. Sobre tal pago de Funespaña a Itcon, consta en el sumario esta anotación manuscrita: "copia transferencia J.I.Rodrigo". El fiscal comprobó los pagos de Funespaña a Itcon pero no localizó ningún soporte del servicio prestado por tal dinero."Existen sólidos indicios de que no existió contraprestación real o valor añadido de ningún genero por parte de Itcon", señalaba el fiscal en su querella. "La suma de estas cantidades (248 millones), pues, salió directamente de los beneficios de la funeraria sin que conste contraprestación real alguna por su pago y desde una sociedad relacionada con Rodrigo (Funespaña) hacia otra también relacionada con él (Itcon)", señalaba el escrito del fiscal.

Rodrigo fue contratado en 1992 por el Ayuntamiento como abogado en los litigios que pudieran surgir por la privatización de la funeraria.