El ex 'número uno' de ETA Francisco Mujika, 'Pakito', niega que fuera dirigente de la banda
Francisco Mujika Garmendia, Pakito, máximo dirigente de ETA hasta 1992, cuando fue detenido en Bidart (Francia) junto con los otros dos integrantes de la dirección, rechazó ayer haber pertenecido a la cúpula de la banda terrorista. Pakito se enfrentaba en la Audiencia Nacional al primer juicio de los que tiene pendientes en España. En este caso está acusado de haber ordenado al comando Argala o itinerante, formado por ciudadanos franceses, que atentase contra el Cuartel General de la Armada, en el paseo del Prado, de Madrid, en mayo de 1987. Un soldado que vigilaba la entrada resultó herido.
El "insulto" del fiscal
El fiscal solicita contra el dirigente etarra una pena de 38 años y cuatro meses por delito de atentado con resultado de lesiones además de un delito de estragos, utilización ilegítima de vehículo a motor y falsificación de placas de matrículas. Pakito, según el fiscal, actuó como inductor, al ordenar el atentado, pero también como cooperador necesario, ya que proporcionó el vehículo y los explosivos que Henri Parot y Jacques Esnal, ya condenados por estos hechos, colocaron e hicieron estallar en el Cuartel General de la Armada.Pakito se enfrentará hoy al segundo juicio por un atentado de las mismas características, cometido el mismo día, 17 de mayo de 1987, contra la Dirección General de la Guardia Civil, en el que murió Carmen Pascual Carrillo.
Mujika vestía tejanos azules y una camiseta gris con el lema "Euskal presoak, Euskal herrira" y declaró en euskera. A preguntas del fiscal Jesús Santos, admitió que era militante de ETA, pero rechazó ser dirigente de la banda terrorista.
Esta actitud no es nueva, ya que su antecesor en el mismo puesto y actual parlamentario de EH José Antonio Urrutikoetxea Bengoetxea, Josu Ternera, mantuvo la misma línea cuando tuvo que declarar por primera vez en España. Ternera declaró el 4 de junio de 1996 ante el juez Baltasar Garzón que no pertenecía ni había pertenecido a la dirección de ETA, según informó entonces su abogado defensor Iñako Goyoaga.
Pakito dijo que no dirigió ETA y que nunca tuvo responsabilidad sobre el comando Argala o itinerante, ni sobre el resto de los grupos de ETA.
Asimismo negó haber ordenado al citado comando que colocase artefactos explosivos en los cuarteles generales de la Armada y el Aire, ni en la Dirección de la Guardia Civil, ni les facilitó armas ni explosivos, ni las llaves de los coches bomba que luego hicieron estallar en los objetivos citados. Y se negó a contestar si conocía a Henri Parot y Jacques Esnal, los autores materiales de los atentados, ya condenados anteriormente.
Henri Parot, Unai, que permanece en prisión por haber cometido numerosos atentados, declaró como testigo. Exculpó a Pakito y acusó al fiscal de insultarle al referirse a ETA como una banda armada. "Fui detenido en España por pertenencia a ETA", dijo el terrorista, "que no es ninguna banda, sino una organización por la independencia de Euskal Herria. No insulte".Sin embargo, a petición del fiscal fueron leídas las declaraciones de Parot ante la Guardia Civil y ante el juez, en las que detalla los modelos de automóviles, cómo se fueron a la Ciudad Universitaria a preparar los explosivos y cómo los dispusieron con un temporizador para que hicieran explosión aproximadamente a la misma hora de la madrugada, sobre las 5.30 horas. Y precisaba que en el momento en el que estallaron las bombas, el comando estaba ya en Francia, pues habían salido a las 10 de la noche del día anterior por la carretera Nacional I.
También fueron leídas las declaraciones de Esnal, en las que inculpa a Pakito. El fiscal pidió que se impusieran las penas en su grado máximo y el defensor, Zigor Reizabal, la absolución.
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