_
_
_
_
_

Una banda de atracadores logra un botín de 500 millones tras secuestrar a los dueños de una joyería de Alicante

El golpe, quizás uno de los más espectaculares ocurridos en Alicante en los últimos años, siguió un guión casi cinematográfico. El atraco a una de las joyerías más selectas de Alicante, la firma Amaya, se consumó en la mañana de ayer y estuvo precedido por el secuestro durante toda la noche anterior de los propietarios del establecimiento en su domicilio particular.La policía sospecha que los autores del asalto (entre seis y ocho personas) pertenecen a una banda de atracadores suramericanos que ya ha operado en otras ciudades españolas. El botín, a la espera de una evaluación definitiva, podría superar los 500 millones de pesetas, según fuentes de la investigación.

Los atracadores sorprendieron al propietario de la joyería y a su esposa sobre las 23.30 horas del martes a las puertas de su domicilio, en la calle Italia, sito a unos 400 metros de la joyería. Los asaltantes mantuvieron secuestrado al matrimonio y su hija con la amenaza de haber colocado una carga de explosivos en el inmueble, que harían estallar si no obedecían sus órdenes. Sobre las 8.30 de la mañana de ayer, dos de ellos acompañaron a la mujer a la joyería, y en diez minutos desvalijaron el comercio mientras los otros secuestradores liberaron al joyero, que rápidamente alertó a la policía.

Un testigo directo de los hechos -un joven operario- relató así lo que vio: "Llegó la mujer acompañada por dos hombres, bien trajeados, morenos y de unos 30 años. A los diez minutos salieron con una pequeña caja en la mano. Luego llegó la policía y liberó a la mujer". Los asaltantes se dieron a la fuga en dos coches.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_