Alardes y mayorías

La indignación contenida por los hechos de Hondarribia ya conocidos por todos me sugiere las siguientes preguntas: ¿qué estarán pensando los padres de los niños que se dedican a insultar, agredir y amenazar a unas mujeres por el mero hecho de querer desfilar en el Alarde de su pueblo? ¿Acaso es distinta esta violencia a la que utilizan los de Jarrai para amedrentar a todo un país? ¿Es tan importante para algunos el Alarde puro, que están dispuestos a lo que sea con tal de que no desfilen las mujeres? ¿No les recuerda a los de ETA, que están dispuestos a matar y morir para conseguir la gran Euskal Herria?Con relación a las mayorías, que tanto les gusta recordar a los tradicionalistas, les diré que los derechos fundamentales nunca se rigen por mayorías caprichosas. Sobre que todos los que quieren un alarde mixto son de HB, es menos cierto que decir que los que presiden la fundación del Alarde privado no tuvieron muchos problemas con el régimen anterior que padecimos en este país.

Aunque a alguien le extrañe esta carta o no la entienda, le diré que la violencia, la ignorancia, la coacción y el fanatismo, todo ello junto, al final desemboca en actitudes fascistas, que es lo que desgraciadamente sobra en este país. Los fanáticos del Alarde tradicional, aunque no se den cuenta, están haciendo lo mismo.- Esteban Aguinagalde Sagarzazu. Hondarribia.